A su amiga le habían dado un día más libre así que fue a visitarla, la baja quería que le mostrara su poder y lo hizo, incluso hizo que ambas flotaran y al escuchar alguien tocar la puerta cayeron a la cama rebotando en esta, se rieron a carcajadas, Chaeyoung tuvo que ir a hablar con uno de los espadachín de nivel más alto, se tenia que esconder pero se asomó para escuchar la conversación tal vez la ascendieran.
Espadachín: ¿Estas lista para mañana?
Chae: Sí.
Espadachín: Todos estarán a las 8 de la mañana en el sitió de la última vez, esta bien si quieres renunciar ahora y salvar tu vida, eres muy joven para morir.
Chae: Gracias por preocuparse por mi pero no daré ni un paso atrás.
Espadachín: Esa actitud me gusta.- palmeó el hombro de la baja.- Nos vemos.
La castaña salio corriendo hacia la habitación cuando el hombre ya se iba y miro a su amiga confundida.
Mina: ¿Qué queria decir con esta bien si renuncias ahora y salvar tu vida?
Chae: Mañana tendremos otra batalla a campo abierto.
Mina: ¿Otra batalla?
Chae: No quería preocuparte.
Mina: Chaeyoung como no quieres que me preocupe si vas a un batalla de campo abierto donde hay muchas posibilidades de que termines muerta.
Chae: Es malo escuchar conversaciones ajenas Mina.
Mina: No vengas con eso ahora, no puedes ir.
Chae: Mina no hay muchos espadachines y si no le demostramos a ese pueblo que somos fuerte, que podemos contra ellos, van a seguir atacando seguido.
Mina: No puedes ir... Quedate por favor...- agarro a su amiga de las manos.- Chae-Chaeyoung...- escuchar su nombre con esa voz quebrándose la hizo sentir un fuerte dolor en su pecho.- No vayas...
Chae: Mina sabes que no puedo.
Mina: Chaeyoung no te vayas...
La puerta se abrió dejando ver a la prima de la castaña con una gran sonrisa y en su mano una bolsa, Mina se limpio rápido las lágrimas.
Rosé: ¿Qué paso?
Mina: ¿Qué haces aquí?
Rosé: Vine a dejarle un amuleto de la suerte a Chaeyoung para su segunda batalla....- la castaña se quedo mirando a la nombrada, era la única que no sabia de eso, vio como la pulsera que habían hecho juntas era retirada de la muñeca de la pelinegra.- Tal vez debería darte un beso también fe la buena suerte.
Agarro la mejilla de Chaeyoung y se acerco a sus labios, Mina salio rápido de la habitación sin mirar atrás, con sus lágrimas brotando de sus ojos y cubriéndose con el sombrero para que nadie la reconociera.
Ahí estaban con sus espadas en manos, con los arcos en sus espalda gritando con fuerza mientras corrían hacia sus oponentes.
En aquel lugar donde antes sólo había pasto verde ahora estaba cubierto con sangre, donde antes solo había silencio ahora el ruido de las espadas chocando, los gritos de dolor, los silbidos de la flechas atravesando el aire, todo eso reinaba en el lugar.
Tzuyu no se rendiría por nada del mundo, tenía que volver con su novia, ella estaba esperándola, cuando le había dicho sobre su poder le prometió no irse de su lado y que iba estar para ella siempre, que la iba amar, había prometido volver como ella prometió esperarla después de tener una noche de pasión y amor.