Capítulo 19

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Pov's Clay

Maldito Andrew.

Costó tanto trabajo que él confesara la muerte de Laura, ese era mi plan original. Hacer que confesara.
Grabar su voz mientras lo hacía.
Ir al instituto.
Ganarme a las personas del instituto siendo carismática y usando un estúpido y corto traje de porrista.
Hackear la computadora que está en la sala del director para que en el receso el audio de Andrew confesando el asesinado se escuchará en los altavoces del pasillo.
Hacerme la desentendida y comenzar a echarle tierra.

No era un plan difícil.

Pero él encontró la manera de echarlo a perder.

Aunque admito que cometí un error al no escuchar la grabación antes de ponerla en los altavoces.

Era una buena forma de exponerlo, públicamente, de su propia boca. Pero arruinó eso también.

Lo jodes todo Brighton.

Lo peor de todo, esque su voz no se distinguió, nadie supo que era él en la grabación, no tengo idea de que pasó, la escuché cientos de veces y su voz era tan clara... Es tan única la seductora, sensual y horrible voz de Andrew Brighton.

Ahora la voz "desconocida" que alguien (sin duda alguna fue él) editó la grabación diciendo que yo había matado a James... Cuando en realidad no fue exactamente así.

La duda que tengo ahora es ¿Cómo logró editar la grabación?. Tal vez lo haya hecho en el instituto, es lo más probable, no creo que haya entrado a mi habitación... No creo.

Llegué a casa de dar una caminata, ayer que pasó lo del instituto no vi otra opción más que irme de ese lugar, tenía que despejar mi mente y pensar que haría para mi próximo movimiento. Estoy frente a mi casa, pero observo que alrededor hay un auto negro estacionado afuera de mi casa, frunzo el ceño, pero decido abrir la puerta principal y entrar a mi casa con el máximo cuidado y sin hacer ruido alguno, cierro nuevamente la puerta para dirigirme hacia la sala, asomo parte de mi rostro a ésta y veo a...

—Clay, te estuvimos esperando.

Mierda.

Me acerco aún más a la sala y sonrío.

—Hola papá — observo a la Detective Méndez, con su característico rostro neutro, sus zapatos de hombre y ese traje negro con centro blanco, su cabello en un moño perfectamente hecho y sin gota alguna de maquillaje —Detective.

—Señorita Dábalo, me alegra verla.

—Si soy sincera, a mí no me alegra. ¿Podría decir a qué vino? No creo que esté aquí para decir que gane un viaje a las Vegas.

Una pequeña sonrisa forzada se asoma en su cansado rostro y se acomoda mejor en el sofá, no veo el rostro de mi papá, pero sé que ha de estar dándome una mirada de desaprobación.

—Por desgracia para usted no es eso a lo que vine. Escuche de su... Incidente en el instituto el día de ayer, el director llamó a la oficina luego de que alguien utilizara los altavoces para pasar una grabación donde alguien confesaba saber que usted fue la responsable de la muerte de James Davenport.

¡Que no soy exactamente culpable les he dicho!

Por cierto, olvidó mencionar el homicidio real que cometí con Logan Gabriel Weels, pero no lo sabe, porque este es un pueblo de asesinos y ellos andan libres en las calles siendo alabados.

—No tengo idea de lo que habla Detective, tuve un problema, alguien quiere hacerme daño, es una persona realmente peligrosa y está loco, es un verdadero asesino y fue él quien ideó todo para hacerme ver culpable, él hizo el plan de los altavoces por qué quiere deshacerse de mi públicamente y yo no me sentía bien, investiga mi pasado y me acosa, no tuve más remedio que irme del pasillo ayer, no lo soporte.

Andrew: La Oscuridad Prevalece  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora