Capítulo 35

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Pov's Elizabeth

—¿Andrew está bien, Jocelyn?

—Si cariño, pero tienen que examinarlo para ver qué clase de drogas de dieron, esperaré los resultados y cuando tú vuelvas podremos llevarlo a casa. ¿Brendan está contigo?

—No, acabo de enviar a Rubí para que esté con él. Yo estoy con Clay todavía en el bosque, tengo que pensar a donde llevarla, no puedo dejarla ir sin más, es una persona peligrosa.

Suspiro poniéndome de cuclillas al ver a Clay desmayada en el suelo, uno de los chicos le dio un golpe en la cabeza luego de que yo se lo ordenara.

—Bueno, solo ten cuidado, avísame cuando vengas en camino.

—Claro, adiós.

Cuelgo la llamada y guardo mi celular en el bolsillo de mi chaqueta. Me pongo de pie y veo que casi todos se fueron, solo se quedaron unos pocos chicos conmigo.

—¿Qué ideas tienen? — pregunto haciendo un ademan con la mano.

—Y ¿Si la matamos ahora?

—No, aunque eso es lo que quiero es asunto de Andrew, no nuestro.

—¿Si la golpeamos hasta que quede desfigurada?

—No.

—¿Le cortamos unos cuantos dedos?

—No.

—¿Dejamos que se la lleve el río?

No es mala idea —Tentador, pero no.

—¿La llevamos a la bodega?

Me detengo un segundo al escuchar la propuesta del chico. La bodega, hace tantos años que descubrí ese lugar abandonado que ahora se ha convertido en el refugio donde todas estas personas pueden ser quién realmente son.

—Levántenla y llévenla hacia mi auto — volteó hacia los chicos y ellos asienten, levantando a Clay y llevándosela por el bosque hasta mi auto, me doy la vuelta y comienzo a caminar hacia el río, está amaneciendo.

El sol está saliendo de entre las montañas y una leve y fina capa de oro baña el bosque, las copas de los árboles resplandecen al entrar en contraste con la luz del sol saliente. Tomo el dije de mi collar y lo sujeto firmemente, siento como alguien está a mi lado, mejor dicho, dos personas se posicionan junto a mí, uno a cada lado.

No les veo el rostro, pero sé quiénes son, siento las manos de ella en mi espalda haciéndome un leve masaje, cierro los ojos disfrutando del movimiento de sus manos en mi espalda. Respiro lentamente y cuando ella deja de hacer esos movimientos habla.

—¿Qué haremos ahora?

Su voz es melodiosa, justo igual que cuando la conocí hace un tiempo, su leve tono de preocupación me da ternura.

—Solo mantenerla vigilada, pero todo estará bien pronto. De eso no tengas dudas.

—Él está por graduarse, ¿Qué crees que haga después?

—No tengo idea, quisiera que se fuera de Dalemaine. Este lugar es... Deprimente, él no merece el sufrimiento que hay aquí, ni él ni Brendan.

—¿Qué hay de Jocelyn?

—Jocelyn mi vieja amiga. Ha cometido una infinidad de errores, pero intenta remediarlos, no es mala, solo fue una persona inocente que manipularon. Pero hace su mejor esfuerzo por redimirse.

—¿Le perdonas lo que le hizo a Claudia Eaton?

Pienso detenidamente en sus palabras, recordando lo que pasó. Pero su pregunta es; si podría perdonarla.

Andrew: La Oscuridad Prevalece  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora