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Misma noche del bar, con Jackson y Yugyeom.

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Yugyeom termino acorralado en la pared y con el cuerpo de Jackson, mientras se estaban besando, respirando un momento por la nariz y suspirando para no separarse tantas ocasiones.

Jackson tenía agarrada firmemente la cintura del Omega, restregando su cuerpo con el suyo, sus feromonas comenzaban a mezclarse y tener un aroma dulce, dando a entender que ambos querían eso.

—No podemos hacerlo aquí— dijo Yugyeom cuándo sintió algunos besos en su cuello, soltando un leve jadeo.

—Lo sé, vamos a un lugar más privado— le dijo Jackson, dejando un último beso en sus labios.

Por suerte, Jackson llevaba su motocicleta, y quedaba más cerca su hogar, su madre probablemente llegaría en la mañana, así que todo estaba a su favor.

No tardaron más de 15 minutos, abriendo la puerta yéndose a tropezones y riendo un poco por esos pasos torpes que tenían.

Hasta que por fin llegaron a la habitación del alfa, Yugyeom tiro a esta a Jackson, poniéndose a horcajadas encima de él.

Restregó sus caderas en el cuerpo del otro, sintiendo en sus glúteos la hombría del alfa.

Se fueron quitando la ropa, dejándola en alguna parte de la habitación, sinceramente era lo que menos les importaba en ese momento, quedando sólo con la ropa interior.

—Eres hermoso— dijeron al mismo tiempo admirando al otro, sonriendo un poco por esa sincronización, Jackson invirtió los papeles ahora, teniendo a Yugyeom debajo de él.

Lo besó por unos breves segundos, siguiendo hacía su cuello, sin dejar marcas, clavículas, pecho, lamiendo un pezón escuchando a Yugyeom gemir.

"Dios, este hombre es perfecto".

Con su mano izquierda, paso lentamente encima de la tela del boxer del otro, notando la reacción del otro, abriendo más sus piernas, con su brazo ocultando su rostro, Jackson ya no lo soportaba, pero no quería ser rudo con él.

Su chaqueta estaba cerca, llevaba un preservativo, no quería terminar preñando al Omega por un descuido.

También, debía prepararlo un poco, sabía que tenía lubricación natural, pero no quería lastimarlo.

Bajo con sus dientes la tela del boxer, dejando expuesto a su pareja frente a él.

Lamió uno de sus dedos de su mano derecha, metiéndolo dentro del contrario, haciendo que este arqueará la espalda, aún no estaba totalmente lubricado.

Poco a poco lo fue moviendo, hasta que vio el rostro de satisfacción del contrario.

—¿Estás preparado?— preguntó Jackson, quitándose igualmente su última prenda de ropa, dejando ver cómo su miembro estaba totalmente erecto.

—S-sí— gimió Yugyeom cuándo sintió ese punto, además de tener la lubricación suficiente.

Jackson abrió el preservativo, colocándoselo, metiendo primero la punta de su miembro en el interior del Omega, hasta quedar totalmente dentro, ambos gimieron por ello.

Comenzó a moverse lento, hasta que Yugyeom movió sus caderas, al parecer le gustaba lo rudo.

Con más rapidez, embestía su interior, Yugyeom apretaba las sábanas de la cama, sus aromas se estaban mezclando, la excitación era evidente.
Jackson miro a Yugyeom, poniendo una de sus piernas en su hombro para que el contacto fuese más profundo.

당신은 내 빛입니다 [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora