𝑴𝒊𝒔𝒊𝒐́𝒏: 𝑺𝒆𝒏̃𝒐𝒓 𝑷𝒂𝒓𝒌 [ 𝑴𝒂𝒓𝒂𝒕𝒐́𝒏 ] 4

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Mañana, mañana, mañana.
Esas eran las únicas palabras que resonaban en la cabeza del pequeño híbrido. Estaba tan feliz que saltaba de emoción por todas partes, si ChanYeol le preguntaba le decía alguna que otra cosa tonta. SeHun envió las invitaciones que, de todos modos sabidas, a los distintos destinatarios, dejando una a ChanYeol pero de forma inusual. Únicamente decía "¿Te gustaría que fuera tu pequeña sorpresa?", Chan sin pensarlo dos veces, se acercó hasta SeHun preguntándole que tenía en mente, esa era su única pregunta. Aunque también le decía que iba a castigarlo si no le decía que era lo que ocurriría, lo castigaría sin golosinas y sin besos, por mucho que amara a ChanYeol podría sobrevivir unos días sin aquellas cosas hermosas en su día a día.

Ni de broma arruinaría lo que había planeado dias atrás, eso sería como una muerte instantánea. Fue a sus actividades por la tarde para distraerse un poco, tenía Natación, ChanYeol lo acompañaba siempre con la excusa de que estaba protegiéndolo de pervertidos mirones. Solo para evitar decir que le gustaba verlo en aquellos pantaloncillos cortos. Extrañaba tocarlo o besarlo hasta que le rogara que lo hiciera suyo, había pasado un tiempo desde la vez que lo habían hecho, desde el incidente de Park, SeHun no había dejado que ChanYeol le tocara un pelo más allá de los besos.

Cuando fue momento de irse, Park lo tomó de la muñeca llevándolo a las duchas, lo metió dentro aprisionándolo con los azulejos diciéndole lo mucho que extrañaba sentir su calor. SeHun se estaba derritiendo, toda la clase había sentido sus ojos clavados en su espaldar, lo necesitaba. ChanYeol lo dió vuelta, bajando aquellos molestos pantaloncillos, haciendo que se inclinara levemente hacia abajo. Sus piernas temblaron al sentir la lengua invasora del mayor en su interior, SeHun gimió y Park cubrió su boca —No quieres que nos descubran ¿Verdad?.—
Preguntó con aquella voz ronca, la cual hizo que SeHun contestara tan sumiso un sutil, "no señor".

Volvió a darlo vuelta, algo brusco lo empujó contra la pared haciendo que se recargara en esta mientras le sostenía, entró en el tan rápido que para evitar que su Niño hiciera ruido, le tuvo ocupado con su lengua, con besos calientes que ambos se daban. ¿Estaban haciendo lo incorrecto?

Se movió por petición del Niño, quien lloriqueaba porque lo hiciera rápido, ChanYeol asintió haciéndole caso a los pedidos de su bebé. Dejando que este le marcara impaciente el cuello, Park le susurraba cosas al oído lo que hacía que le dieran aún más ganas. Ganas de ChanYeol. Se habían extrañado tanto carnalmente hablando que SeHun se corrió varias veces en tan poco tiempo, Park le llenó tanto que hasta el líquido goteaba del pequeño. Se cansaron, y Hun murmuró que tenía sueño pero, aún debía ducharse, y volver juntos a casa. Eso le puso de mal humor y en modo caprichoso.

—Channie no quiero, ¿no puedes cubrirme con algo y sacarme por otro sitio? ¡No tengo ganas! ¡Estoy cansado!.— Reprochaba SeHun mientras que ChanYeol le escuchaba al otro lado de la ducha contendiendo las ganas de reírse que tenía, Hun enojado era la cosa más tierna que había visto en toda su vida.

𝑳𝒊𝒕𝒕𝒍𝒆 𝑾𝒐𝒍𝒇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora