Revenge

XXXII

Charlotte

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Mi vida apesta.

Bueno apesta ahora que vivo en Florida.

Para empezar con mi lista de quejas debería de decirles que he pensado en teñir mi pelo de rosa pero de todos modos me confundirían con Chelsea porque ella la ‘‘salvaje’’, no eran mis palabras sino la de mi padre cuando le pregunte si me podía llevar al salón de belleza a teñirme.

Ahora si con mi lista de quejas: lo primero es que me han puesto a trabajar para ahorrar y así no tener que pedir dinero, otra vez palabras de papá. Lo segundo es que en el trabajo me confunden con Chelsea tan solo por que me hice una coleta desordenada. Lo tercero, he intentado llamar a Kriss y ni siquiera contesta mis llamadas. Lo cuarto es que papá me informo que iría a la misma escuela que Chelsea y lo ultimo pero menos importante, mamá no me deja de enviar mensajes para que le de un chance de explicarle lo que paso.

<<Deberías de sentirte alagada, tu madre tuvo tres hijos y fuiste la única a la que no abandono>>

<<Técnicamente Chelsea decidió quedarse con papá así que no la abandonó>>

<<No la busco por todos estos años, eso me suena a abandono>>

Salí de mi conciencia estúpida, es decir yo, cuando me toparon en el hombro haciendo que girara y levantara la vista.

Creo que no babee de casualidad, el chico era hermoso.

—¿Eres Charlotte? —pregunto curioso a lo que tuve que asentir porque de seguro haría un vomito verbal —Soy Nate, el ex de Chelsea. Un placer conocerte.

<<No sabía que nuestra hermanita tenia este bombón escondido>>

—Oh claro —murmure sabiendo que si intentaba por lo menos ligar con el terminaría muerta —Un gusto.

—¿Sabes si tu papá está en su oficina?

—Sí, está allí. Yo iba para allá de todos modos ¿necesitas algo?

—No te preocupes, te acompañare. Después de ti —ofreció para que tomara la delantera, lo que hice caminando a paso normal

<<Aparte de guapo, caballeroso. ¿Estas segura de que no quieres con él? Estoy segura de que a nuestra hermana no le importara, de todos modos por su culpa nuestro novio nos cortó>>

Apreté mis puños con fuerza ante el giro de mis pensamientos y me hice consiente de que ya estaba tocando la puerta de la oficina de papá

<<Otro recordatorio de que no eres la niña de papá. ¿Ya viste los recuadros? Chelsea, Chelsea y más Chelsea por todos lados. ¿No te sientes reemplazada?

—Papá —llame y apreté más mis puños porque mi voz salió sin aire —Me iré a comer algo con mamá, ella quiere explicarme el asunto de mi supuesto hermano —dije a lo que el asintió

—Claro, si quieres vuelve a casa. De todos modos estoy casi por terminar así que me quedare un rato más para luego ir a la oficina de Megan.

Asentí, me pregunto si papá estaba tan emocionado de ver a mamá de ese modo cuando estaban juntos.

—Gary —llamo una voz detrás de mí y me sorprendí de que me había olvidado del hermoso ex —Mucho tiempo que no nos vemos —saludo a lo que él lo miro sorprendido pero luego sonrió como si nada ha pasado

—Nate, una grata sorpresa verte por aquí. ¿Ocurre algo?

<<Como nadie me había pedido salir me podía quedar escuchando un poco ¿puedo?>>