(Yurio)
Cada dia que pasa me siento peor, quiero terminar con esto de una vez por todas.Hoy iremos a la ciudad, espero que así pueda hacer algo.
Veo a Otabek quien me espera en el auto mientras fui a la farmacia.
La farmacéutica me dio unas pastillas que eran para el mal de estómago y una pastilla abortiva la cual escondí en la caja.
Esta será capaz de matar al bebé y sacarlo por completo sin necesidad de que me hagan limpieza.Llego al auto y me subo y beso a Otabek en los labios y le sonrió.
Yurio: Ya volvi... Espero que mi dolor de estómago se quite con esto...
Le mostré la cajita de pastillas y este la tomo y miro el nombre y me la devolvió.
Otabek: Sigo sin saber porque quisiste venir cuando yo podria traerlo.
Mire a Otabek y me le acerque más a él.
Yurio: Porque quería pasear un poco contigo y además las que me trajiste la ultima vez me hicieron sentirme peor amor...
Hice un puchero y lo mire a los ojos.
Yurio:Recuerda que mi cuerpo es diferente y necesitaba consultar primero.
Otabek: Supongo que tienes razón... Y te he tenido muy olvidado en la casa... ¿Quieres que vayamos a patinar aprovechando que estamos aquí?
Le sonreí.
Tengo 2 meses en los cuales no he patinado desde que me fui a vivir con Otabek.
Tambien tengo ese tiempo que no se nada de los demás.
Yurio: Amor... ¿Podríamos ir a ver a Viktor y Yuuri?
Otabek me miro y acaricio mi mejilla.
Otabek: ¿En realidad deseas eso?
Asentí mirando a Otabek a los ojos.
Yurio: Quiero que sepan que soy feliz contigo... Solo eso.
Otabek: Esta bien... Pero primero tienes que ponerte bien de tu estómago y luego vendremos a verlos.
Por difícil que creyera, había aprendido a dominar a Otabek.
Le sonreí y bese sus labios.
Yurio: Gracias osito... Te prometo que me pondré bien...
Me volví a sentar en mi lugar y sentí un leve movimiento en mi vientre pero lo ignoré y miré por la ventana.
No quiero a ese bebé.
Se que no tiene la culpa pero no deseo tener un bebé con la persona que me hizo tanto daño.
Cerré mis ojos y sin pensarlo me quede dormido.
Cuando menos acorde sentí las manos de Otabek cargarme y me acurruque en su pecho y sentí como me llevo a la habitacion.
Traía la caja de pastillas aferrada a mis manos.
Esa era mi unica salvacion para quitarme esta carga.
Al poco tiempo desperté y vi que aun traía la cajita en la mano.
Al parecer Otabek la dejó ahí al saber que no podría quitarla dado a que dormido me aferro muy bien a las cosas.
Vi que en la mesita al lado de la cama estaba una nota de el.
"Iré a la ciudad... Olvide comprar algunas cosas para la alacena, te veías tan lindo dormido que no te quise despertar... Te veo en una hora... Te amo"
Tu osito.Sonreí y abrí la caja de pastillas y tomé la pastilla abortiva.
Fui a la cocina y tome un vaso y lo llene de agua y me dirigí al cuarto de baño.
Segun me dijo la farmaceutica, era tan efectiva que actuaba a los pocos segundos y no quiero que se llene de sangre.
Me desvesti y abrí la regadera y entre bajo el agua.
Alce el vaso y me tome la pastilla rápidamente.
A los pocos segundos sentí un enorme dolor en mi vientre.
Era igual al de esa vez.
Sentí como mi entrada comenzaba a escurrir algo y mire el piso y note como la sangre se mezclaba con el agua que caía.
Lo siento pequeño, pero solo vendrías a sufrir a este mundo.
Te estoy salvando de ello.
Sintió como la cantidad de sangre era mayor.
Miro como un pequeño bulto caía en medio de sus pies y se agachó para tomarlo.Lo miro fijamente y una sonrisa apareció en su rostro.
Su cometido estaba hecho.
Extendió su mano en el váter y lo arrojó tirando de la cadena y viendo como este se iba por el desagüe.
Siguió duchándose hasta que no quedó ninguna marca de su recién aborto.
Salió del cuarto de baño y se cambió y fue a la cocina para prepararse algo de comer.
Encendio la television e hizo zamping en los canales.
Era lo unico que podia mantenerlo ocupado, dado que no había señal, ni internet.
Vio las noticias y le llamaron la atención un reportaje.
Yuuri Katsuki y su esposo Viktor Nikiforov habían tenido un accidente donde el albino había muerto de forma instantánea y el japonés se encontraba en coma.
Lleve mis manos a mi boca y sentí que comenzaba a llorar.
¿Por que ellos?
No era que los quería, pero ellos me habían dado un hogar por cierto tiempo.
Sentí que alguien entraba a la casa pero no desvie mi mirada del televisor.
Otabek: ¿Gatito? ¿Sucede algo?
Oí la voz de Otabek y voltee a verlo con mis ojos llorosos.Yurio: Quiero ver a Yuuri...
Otabek: Pero...
Otabek fijó su mirada en el televisor y de igual manera se sorprendió.Al parecer tampoco sabía de ello.
Otabek: Te llevaré inmediatamente amor...
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Más que Ágape
DiversosDespues de la muerte del abuelo de Yurio, Viktor y Yuuri lo han adoptado y llevado a vivir con ellos. A pesar de la actitud arrogante del ruso poco a poco comenzó a ceder ante el cariño de ambos. Aunque el rubio tiene un gran secreto, que muy pronto...