Con espías y civiles

Capítulo XL

--Bien esto va para ti Amber, más te vale cerrar la boca-- le dije en un tono frío-- no puedes estar diciéndole todo lo que sabes a quien sea. En estos momentos Benjamín, Bea e incluso yo son la únicas personas en las que puedes confiar -- los apunte uno a uno-- y también va para ustedes-- les dije-- no confíen en nadie, nadie. Ni siquiera mi gente o incluso mi padre, conmigo no tienen opción porque los cuatro estamos embarrados en esto pero se los digo bien.

--Ni siquiera confías en tu propio padre-- su tono no me gustó nada.

--No confío en nadie -- la mire mal-- si no quirres que el problema se haga más grande te quedaras callada con respecto a lo que les conté. Cuando ellos vengan por nosotros los interrogaran y tu serás la presa de ellos por ser la hija de Smith, aunque mi gente apoye buenas causas no todos son como yo-- le advertí-- Bea, cuida bien esa joya. Es muy peligroso que yo la lleve y nadie sabe que te la di.

Marque el número de mi padre y después de una ataque de preguntas solo le dije dónde me encontraba y mandaron agentes armados por nosotros.

Veinte minutos después ya estábamos dentro de las instalaciones de la agencia de New York. Debo admitir que están increíbles pero las de Londres son mejor.

Cada paso que dábamos los chicos se quedaban con la boca abierta al ver todo lo que había dentro. Este es mi mundo y ahora lo conocían mejor. Algunos agentes iban rodeandonos mientras nos guiaban a la oficina central donde probablemente mi padre me espera. Los cuchicheos no tardaron en aparecer, todos dejaron sus tareas para vernos pasar con extrema curiosidad.

--Agente Laforêt, los superiores Laforêt y York la esperan dentro al igual que el agente Johnson-- auncio uno de los hombres que nos traían. Así que ella estaba aquí.  Hizo un saludo militar que no pasó desapercibido por compañeros-- paso a retirarme, superiora-- no soy una superiora pero mi posición si era alta y muchos me llamaba así o almenos lo hacían en Londres.

--Muy bien-- los despedí y me dispuse  abrir esa puerta.

Apenas si entre tres pares de ojos se posaron en mi y Cindi trato de llegar hasta mi pero la evadi.

--¿Cariño cómo estás?-- iba a abrazarme pero la pasé de largo.

No me interesa sus falsas palabras y su hipocresía, se merece que le meta una bala el la cabeza o corazón por lo que a hecho.

--Laforêt-- dijo la jefa de esta sede en un tono que no me gustó.

--York-- le respondió con la misma hostilidad, parecía que no le agradaba verme y para estar parejo yo pensaba lo mismo.

--Ten cuidado  como me hablas, soy tu superiora-- me amenazó. Mi sonrisa se curvo más de la cuenta, amo las amenazas.

--La verdad es que no, nadie en este lugar es mi superior-- dije.

--Elizabeth, no seas grosera-- me reprendió.

--No me llames así Nick, tengo un conflicto muy grande con ese nombre-- le dije entre dientes.

--¿Este es el comportamiento de su mejor agente, jefe Laforêt?-- le pregunto enfadada-- vaya decepción.

--No es un agente, la di de baja-- era como si tratara de defenderme.

--Si, como lo ve ya no trabajo para ustedes solo para mi y lo agradezco porque lo que si causa decepción son ustedes, los agentes de esta sede-- Amber se tragó una risa burlona pero no paso desapercibida por ellos-- deberías hacer tu trabajo-- le dije a la jefa-- yo vine a este país para poder tener una vida normal y gracias a tu incompetencia salí embarrada en algo que no tengo nada que ver. Pudimos haber muerto, yo estoy entrenada para situaciones difíciles pero ellos no-- apunte a mis amigos-- es una suerte que no tengan heridas graves.

--¿No entiendo a que te refieres?, estás entrenada para protejer civiles y más vale que hagas tu trabajo Laforêt-- estaba molesta-- es la última vez que me hablas así y más te vale que respondas preguntas porque no voy a permitir ese comportamiento.

--¿Sabes que es lo que yo no voy a permitir? Que no hagas tu trabajo, tu deber es proteger a las personas de este país y los vecinos y aún así no te importa y dejas que criminales hagan sus cosas. ¿Por qué no hablamos de la agente Smirnov? Ella y su equipo murieron en este país tratando de resolver lo que tú no pudiste-- la desafíe-- ¿Sabes porque me querían a mi y mis amigos terminaron embarrados en sus estupideces? No voy a tolerar tu incompetencia como jefa. Si no puedes hacer el trabajo, déjalo.

--¡Katerine Elizabeth!-- grito mi padre enojado-- no voy a tolerar este comportamiento señorita.

--Tu y yo tendremos una charla bastante larga y probablemente después no vuelvas a verme en un tiempo-- le dije decepcionada-- en parte es tu culpa, te negaste a decirme que paso con Lara y ahora me he enterado de la forma más cruel que fue lo que le pasó. Me mandaste aquí para tener una vida normal y cuando lo estaba logrando todo se fue a la mierda, hice amigos, me enamoré perdidamente y ahora ellos saben que soy una asesina a sueldo, ¿pero sabes que es lo peor de todo? Descubrí que tengo una hermana la cual su padre mató al mío e hizo que mi madre me abandonara y ahora quiere verme muerta porque Smirnov me dio lo que le robó.

>Mi vida se convirtió en una mierda desde que te casaste con Cindi-- la voltee a ver y le sonreí muy hipócritamente-- sabes que no eres tu sino yo-- le dije y me volví a la jefa-- el agente Smirnov logró robar información que hará caer a esas personas y sin saberlo me la confió a mi, por eso mandaron por mi y nos secuestraron a todo. Afortunadamente logre engañarlo y la información está a salvo al igual que nosotros.

--Muy bien, damela-- la necesidad con la que me lo exigía me hizo dudar de ella, algo anda mal aquí.

--¿No has entendido ninguna de mis palabras?--le dije-- no trabajo para ti, ahora si me disculpas iré a vomitar todo la mierda que traigo dentro.

Camine hasta la puerta decidida a largarme de aquí.

--He dicho que me la des, obedece!-- grito y yo me detuve con la mano en la manija, sentía algo dentro de mi, como si en verdad quisiera vomitar así que cai de rodillas mientras con la mano libre me tapaba la boca.

Tosi un poco y vi que estaba sangrando, había escupido sangre, las fuerzas me abandonaron y caí al suelo.