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En la escuela.

Estrella iba llegando y a la primer persona que encontró fue a su falsa mejor amiga.

-Hector.- dijo la chica con enojó.

¡Jamás le iba a perdonar lo que le hizo, hasta le iba a pedir que sea su madrina de bodas cuando se casé pero todo resultó ser una vil mentira!

-Ése es mi nombre, no lo gastes.-dijo el rubio mientras se miraba en un espejo de mano.

-Es raro no verte con mi novio.

Aún recuerda que hace poco quiso tener una cita con Brian y Hector los encontró por "casualidad" y se les unió.

-Es que lleva todo el día enviandole mensajes a una vieja.

-¡¿Qué?! ¡No lo haría!

Ella lo sabía, su novio no era un infiel ni tan tonto como para atreverse a engañarla.

-Pregúntale y fíjate.- dijo Hector mientras señalaba a su mejor amigo.

La chica, vio que su novio estaba muy concentrado con su celular y se le acercó, conteniendo su enojó.

A Hector le gusta ver al mundo arder pero no arder en el así que quizás sólo sea una de sus bromas.

-¿Qué haces?- preguntó la chica mientras se detenía a lado de su novio y le mostraba una sonrisa.

-Le mandó un mensaje a alguien.- respondió Brian con simpleza pero por un raro motivo sentía que su vida corría peligro.

Quizás sólo era su imaginación.

-¿Es una chica?- preguntó Estrella mientras parpadeaba de manera adorable.

El chico, tragó duró.

Ver a su novia actuar de manera adorable era aterrador.

-Sí... ¿por qué la curiosidad?- preguntó el ya algo asustado chico.

-Es que en las notícias mostraron que una chica igualita a ésa murió... mañana.- respondió Estrella mientras sacaba una cuchara de quien sabe donde y ampliaba su sonrisa.

-¡Es mi abuela!- dijo el chico, asustado.

-¡Hector!

Y Estrella miró en dirección del rubio con enojó.

-¿Qué? Te dije que era una vieja.- aclaró el rubio con calma.

-Viejo será tu calzoncillo.- le dijo Brian con enojó.

-¿Qué te hace pensar que usó uno?- preguntó Hector.

-¡Que asco!

Dijo la parejita al unísono mientras Hector apoyaba sus manos en sus cadera y la movía.

-Es un país libre y no existe ninguna ley que te obligue a usar ropa interior.

Sí usas ropa interior o no, nadie lo sabe y a nadie le importa, pensamientos de Hector.

-¿Por qué eres amigo de él?- preguntó Estrella a su novio.

Brian se cruzó de brazos y quedó con la mirada perdida.

Es verdad, ¿por qué?

-Siempre me lo preguntó... supongo que así al menos no nos aburrimos tanto.

-Sí, tienes razón, pero me gustaría que alguien le dé su merecido por una vez.

No soportaban a Hector pero era algo así como la mascota del curso, muy molesta pero extrañable sí falta.

-Hola, ¿de casualidad tu mamá es panadera?

Oyeron la voz de Sam y voltearon sorprendidos para ver que se lo decía a Hector.

¡¿Qué pasa con ésa chica?!

-¿Por qué soy todo un pastel?- preguntó el rubio con una sonrisa presumida.

La belleza es su bendición, su maldición.

-No, por que se le cayeron cucarachas a la masa y se le echo a perder.- respondió la chica.

-¡Oye! Hieres mis sentimientos.- dijo Hector con los ojos llorosos.

-¡Ohhh!- celebraron Brian y Estrella por ésa burla.

-¡Pero te voy a acusar!

Y Héctor fue a buscar a un docente para acusar a Sam por molestarlo.

-Buena ésa Sam.- dijo Estrella mientras se acercaba a su amiga.

Ésa chica tiene su respeto.

-Gracias, con ésta ya vamos 548 a 2.- aclaró la chica con orgullo.

-¡¿Él te hizo tantas bromas?!- preguntó Brian con sorpresa.

¡Creía que Hector sólo le hacía tantas bromas a él! ¡Creyó que tenían algo especial!

-Dos no es un gran número.- dijo Sam.

La pareja se sorprendió al oír éso y Estrella se arrodilló.

-Por favor, permíteme llamarte sensei.- pidió la chica de pecas.

-¿Qué significa sense...

-¡No lo arruines, Brian!

-Ya me callé.

Y desde ése día, Sam fue respetada por todos mientras que Brian decidió darle una oportunidad al anime para entender mejor a su novia y amigos.

Continuará...
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¡Hola!

Próximamente, Brian se vulve otaku y le roba el lugar a Lin que por fín descanso en un capítulo.

Espero que les haya gustado el capítulo.

Gracias por su tiempo.

Volveré...

Hector y su vida normal (humor)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora