Capítulo 13

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Zee:

Tal vez estoy demente y es lo más probable, pero no pude detenerme, verlo tan feliz, tan relajado, bailando y riendo con sus amigos, quería a ese Saint para mí, sólo para mí y había una sola forma de conseguirlo, alejarlo del mundo que nos hace discutir por todo.

Fui arriesgado, estaba bastante seguro de que sería enviado al diablo, pero no fue de esa forma, Saint aceptó irse conmigo, ni siquiera siguió preguntando dónde iríamos, estaba confiando en mí.

En algún punto de nuestro viaje él sucumbió al cansancio, se veía adorable durmiendo en el asiento de copiloto, yo conduje, por mucho, mucho tiempo, deteniéndome sólo en una estación para recargar el tanque del carro y comprar cosas para comer, también algo de café, después sólo seguí mi camino.

Necesitaba poner tanta distancia como fuera posible de nuestra cuidad y cuando escuché su celular comenzar a sonar en su pantalón, me detuve en el costado de la carretera y después con cuidado lo saqué, ni siquiera revisé quien era, sólo apagué el aparato, también lo hice con el mío, el mundo podía esperar hasta que volviéramos el lunes.

La verdad es que terminar con la mentira de aún no tener carro, resultó bastante beneficioso, hace ya dos días mi agencia de seguros me entregó el auto, pero Saint seguía pasándome a buscar y dejar, no quería renunciar a eso, así que tenía oculto el coche hasta hoy.

Conduje hasta que llegué a un Resort, uno donde arrendé una de las cabañas V.I.P en la parte de atrás, teníamos todo separado del resto de las demás personas, incluso piscina privada, sería nuestro propio planeta, intervenido sólo cuando necesitáramos comer.

Cuando tuve todo listo conduje mi carro hasta nuestro lugar oculto del resto del mundo, cargué a mi borracho Saint hasta la cabaña y lo llevé directo a la que sería nuestra cama, lo recosté y le quité con cuidado sus prendas, después me tumbé a su lado, sólo mirando lo hermoso que es y las estupideces que hago por su belleza, por poder tener tiempo a su lado.

Desde que se enojó el día de la cita con el médico no hemos hablado, nos hemos besado y hemos tenido sexo, pero no hay palabras, nada, Saint sólo pregunta cosas escuetas sobre trabajo y se aleja, ya no puedo aceptar algo como eso, él debe quedarse a mi lado, el tiempo que podamos, si es que nos queda tiempo juntos.

Podría no ser de esa forma, si las cosas siguen como las vi esta noche entre Saint y Joss, creo que mi amigo va a lograr alejar a Saint de mí, lo vi en la forma en como lo sujetaba contra él, la manera orgullosa que tenía de lucir al chico frente a todos, como se reían, incluso lo besó y le valió todo que estaba en medio de la pista de su nuevo club.

No sé en que momento me quedé dormido mirando su rostro, pero al menos sabía algo cuando mis ojos terminaban de cerrarse, era la primera vez que dormía con Saint, cuando abriera los ojos él estaría justo a mi lado y eso era relajante.

O eso creía, porque resulta que volví a despertar en una cama sólo, primero pasé por la preocupación cuando no lo vi en ningún lugar, después vino la rabia, pero decidí tomar un baño para no hacer una estupidez, no era como si lo pudiera culpar por irse, cuando aceptó estaba borracho, tal vez ahora sobrio se dio cuenta de su error.

Podría ir a buscarlo, convencerlo de que también necesita de este tiempo, pero no sé dónde pueda estar ahora,  mucho menos puedo llamarlo porque su celular está en mi carro, apagado, sin vida y sin la opción de decirme que Saint está bien.

Suelto un suspiro cuando la preocupación vuelve a surgir, pongo una toalla en mis caderas y tomo una para el cabello, tendré que salir a buscar por los alrededores a ver si aparece, para ver si no está perdido que es lo más lógico, ni siquiera yo sé dónde estamos, sólo conduje hasta dar con un Resort.

Amando lo ProhibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora