Problematica (Draco Malfoy) #Book1

Cap 8 (Sin editar)

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(A la proxima semana)

Solo hay una cosa que me gusta, que las lecciones de vuelo comenzarían el jueves... Y Gryffindor y Slytherin aprenderían juntos.

yo: ¿Me enseñas? Obviamente, no se y no quiero hacer el ridiculo.

Deseaba aprender a volar más que ninguna otra cosa.

Draco: Aprenderas alli Silianne, para eso son clases.

La verdad es que Draco hablaba mucho sobre volar. Se quejaba porque los de primer año nunca estaban en los equipos de quidditch y contaba largas y jactanciosas historias, que siempre acababan con él escapando de helicópteros pilotados por muggles. Me fascinaba escuchar esas historias. Ultimamente, Snape se portaba muy normal conmigo, excepto, cuando me mencionaba. Habian veces en las que decia "señorita Sl.....Silianne" o también "señorita R... Gold''

Siguiendo con el tema del vuelo, Granger estaba casi tan nerviosa como Longbottom con el tema del vuelo. Eso era algo que no se podía aprender de memoria en los libros, aunque lo había intentado, se comia los libros. En el desayuno del jueves, aburrió a todos con estúpidas notas sobre el vuelo que había encontrado en un libro de la biblioteca, llamado Quidditch a través de los tiempos. ¡Menos mal que no quede en Gryffindor! Longbottom estaba pendiente de cada palabra, desesperado por encontrar algo que lo ayudara más tarde con su escoba, penoso. De un momento a otro, dejamos de oir la chillona voz de la sangre sucia, ya que fue interrumpida por la llegada del correo.

La lechuza de Draco siempre traia de su casa paquetes con golosinas, que el abría en la mesa de Slytherin. Ya acordamos que 45% para el, 45% para mi, 10% Crabbe y Goyle. Ayer mi madre me envio varias fundas de varitas con diamantes verdes y plateados para que elijiese. Elejí un modelo precioso, que llegaria en unos dias.

Draco: Mira a Longbottom. -me susurro al oido, lo que ya era era una constumbre- Eso es una recordadora.

tu: ¡Ala! 

Draco: ¿Quieres verla mas de cerca? -asentí rapidamente. Junto a Draco, me habia dado cuenta de que el me iba a dar todo lo que quisiera, a veces me aprovechaba de ello pero, que mas da.

Ambos nos levantamos, caminamos hacia la mesa de los leones y Draco le quitó la Recordadora de las manos, para luego pasarmela a mi. Y hay estaba yo, como una friki, mirando la recordadora, que estaba verde. ¿Que significará eso? Cara rajada y Pelo zanahoria saltaron de sus asientos. Estaban a punto de liarse a ostias contra mi y Draco cuando la profesora McGonagall, que detectaba problemas más rápido que ningún otro profesor del colegio, ya estaba allí.

McGonagall: ¿Qué sucede?

Neville: Malfoy me ha quitado mi Recordadora, profesora. Ahora la tiene Narnia.

Como siempre, McGonagall se puso blanca y me miró. Estaba a punto de hablar cuando Draco me arrebató la recordadora de las manos, haciendo que me quejara.

Draco: Sólo la miraba —dijo y la dejo en la mesa, medio tirandola, mientras que yo le daba un zape a Longbotton por ser un bocazas. McGonagall solo abrio la boca para protestar, pero nosotros ya nos habiamos ido, junto a Crabbe y Goyle. Puso su brazo sobre mis hombros y luego de que me susurrara un ¿Disfrutaste? , salimos del Gran Comedor.

Era un día claro y ventoso. La hierba se agitaba bajo nuestros pies mientras que se podia marcar perfectamente por el terreno inclinado en dirección a un prado que estaba al otro lado del bosque prohibido, cuyos árboles se agitaban tenebrosamente en la distancia. Draco y yo fuimos los primeros en llegar y también las veinte escobas, cuidadosamente alineadas en el suelo.