Zerstörung. [TERMINADA]✔️

Capítulo 5

"Nash Brooks estás en problemas", esa maldita frase no salía de mi cabeza, como podía ser posible que tuviera problemas, cuando ni siquiera me llevaba mal con nadie.

—Genial Brooks. — murmuré para mí mismo mirándome en el espejo de los baños de la universidad.

Mis ojeras eran algo notables y con mucha exageración, ¿Quién diablos me estaba amenazando de esa forma?. Abrí el grifo y me lave la cara por segunda vez, tomé papel y me seque, pero ahora no estaba solo, a mi lado se encontraba Michael.

Lo había estado evitando desde que entré a la universidad y ahora estaba a un lado de mi mirándome con un semblante serio. Sus ojos azules traspasaban los míos haciéndome sentir incómodo.

—¿Porque no asististe a la cita?— pregunto tratando de no sonar molesto pero claramente eso se notaba mucho.

—Tenía cosas importantes que hacer.

—¿Más importantes que yo como para dejarme plantado?

—Si.— solté antes de que pudiera procesar mi respuesta.

Apartó su mirada de mi en cuanto mis palabras salieron de mi garganta. Le había dolido que dijera eso o al menos eso parecía.

Tomé mi mochila para salir del baño pero el tomo mi mano, empujándome contra la pared sus manos quedaron a lado de mi cabeza. Sus ojos mirándome fijamente y la molestia en su rostro notable.

—¿A dónde crees que ibas?— me espeto con furia —. No hemos terminado de hablar Nash.— gruño.

Mi corazón estaba latiendo desesperadamente y mi respiración estaba siendo un desastre gracias a qué estaba invadiendo mi espacio personal, aparte mi mirada de la suya y mire su pecho el cual subía y bajaba demasiado rápido.

—Estas invadiendo mi espacio personal, te importaría quitarte.

—No.

—No entiendo cual es tu maldito problema bocher ya te dije porque no pude ir así que dame permiso.— quería empujarlo y alejarlo de mí pero saber que le tocaría alguna parte de su cuerpo me ponía nervioso.

—¿Quieres saber cuál es mi maldito problema?— gruño —. Que durante toda mi jodida vida nadie me había dejado plantado y que tú lo hayas echo es como tocarme las pelotas.

—Me siento orgulloso de ser el primero, así que dame permiso ahora.

—Nash mírame —pidió. —Mírame o mi lengua explorará tu boca.

—¿Disculpa?— levante mi mirada para observarlo. Una sonrisa burlona se dibujaba en su rostro.

—No me gusta repetir las cosas y lo sabes.

Pero que le pasaba, hace un momento estaba enojado y ahora dice que quiere besarme, un momento ¿Quiere besarme? Eso quiere decir que...

Solo podía averiguar mis sospechas comprobandolo.

—No te atreverías a besarme  por qué eres hetero.— solté orgulloso de mi mismo.

Su mano se deslizó a mi cadera para acercarme a él, haciendo que su respiración se mezclara con la mía.

«Mierda Nash»

Me maldije varias veces mentalmente, esto no podía estar pasando.

—Soy Gay al igual que tú.— susurró en mi oído.

Al igual que yo, pero joder cuando le pregunté parecía como si no supiera.

Maldición.

Él de seguro quería jugar conmigo o peor, burlase de mi y humillarme, ¿Porque todo me salía mal?

—No se de qué hablas.

—No te preocupes yo te mostraré de que habló.

Acortó la distancia entre nosotros y me beso. Mi corazón no dejaba de latir demasiado rápido, mi cuerpo no reaccionaba y mi mente estaba en un estado de shock.

—Bésame Nash, bésame — rogó —. No voy a dejarte ir si no me besas.

No quería besarlo, no quería que jugará con mis sentimientos y después me humillara.

—No quiero ser parte de tu juego.

—No eres un juego para mí Nash— me aclaro. —, tú me atraes de una manera única e inexplicable, te prometo que de verdad no eres un maldito juego para mi.

Sus ojos mostraban sinceridad, talvez decía la verdad, el también me gustaba solo que no confiaba en él pero si con el tiempo me demostraba que no era así talvez podía darle una oportunidad.

—No confío en ti y porque me amo a mi mismo no caeré en tu juego — Michael se alejo de mi como si le hubiera dado un golpe para separarlo de mi —. Lo siento. — recogí mi mochila del suelo y salí del baño lo más rápido que pude.

No podía regresar a mi aula porque la clase ya había empezado desde hace minutos, así que camine al campo donde siempre entrenaban los chicos de la universidad, me sente en las gradas y por instinto toque mis labios, me había besado el chico por el que todas las chicas se morían.

Apesar de que Michael era hermosamente guapo no dejaría que jugará conmigo, si él de verdad quería conmigo o le atraía tenía que ganarme.

Voltee hacia mi lado izquierdo cuando escuché la tabla de la grada crugir, él estaba subiendo las gradas para llegar a mi, mi corazón volvió a latir con rapidez.

—No voy a intentar besarte está vez — levantó su brazos a modo de rendición —. Solo quiero que me digas cómo puedo ganarme tu amor.

—Demostrándome que no jugaras conmigo.

—Ya te dije que no voy a jugar contigo.— bufó.

—No te creo, eres el capitán del equipo de fútbol y eso implica que quieras burlarte de mi.

—En todo caso también se burlarían de mi, ¿No lo crees?

—De ti no creo, hay muchas chicas que te aman y te defenderían ya sabes tú serías la víctima.

—¿Que te hace pensar eso? — frunci el ceño —. Lo primero que dirían sería: ¡Que asco Böttcher es gay! ¡No lo puedo creer es gay!— una sonrisa apareció en mi rostro al oírlo usar voz chillona para imitar a las chicas.

—Sacarían nuestro romance en los periódicos.— lo apoye con su pequeño drama.

—No lo dudes cuando alguien se decide a salirse del closet o confiesa algo, todo mundo lo grita a los cuatro vientos para juzgarte.

—Exacto, ¿Estás seguro de quieres arruinar tu reputación?

—¿Mi reputación?, Crees que eso me interesa —bufo —. Si tú me dices en este momento que también te sientes atraído por mi, ten por seguro que yo lucharé por los dos.

Sus malditas palabras hicieron que mi corazón quisiera salirse de mi pecho y mi nerviosismo aumento en segundos, parecía sincero realmente lo parecía, y todos merecemos una oportunidad ¿No es así?.

—Tambien me gustas Bocher.— un sonrisa aprecio en su rostro y sus ojos brillaron con emoción.

—Mi nombre es Böttcher, Nash y te prometo que lucharé por ti.