Düsseldorf Alemania.
Hans Böttcher.
Las luces neon del lugar me cegaron al entrar al club, un olor a sudor con vodka y cigarrillos llegó a mis fosas nasales, la masa de gente bailaba dejando fluir sus cuerpos.
—¡Pero que veo aquí!— la voz del ojiazul se hizo presente entre todo el ruido —. ¿Cuando regresaste de Italia?
—Tengo poco días aquí — murmuré tomando asiento a su lado.
—¿Y tú hermano?
La sola mención de esa palabra me hizo tensarme me dolía verlo triste y llorar en su habitación hasta quedarse dormido.
—En casa.
—¿Pasa algo? No te vez nada bien.
—Mi familia está pasando por un problema prejuicioso, a eso se debe nuestro regreso.
El chico de cabello azul sentado a mi lado frunció el ceño —. No entiendo, explícate hermano.
—Michael es gay y mi papá no lo acepta, ahora yo tengo que tomar el mando de la empresa por lo que me obligó a dejar mi carrera de médico forense, sabes que Michael era al único que le apasionaba esa mierda de la empresa por esa razón mi papá me dejó estudiar la carrera de forense.
—¡Joder! — le dió un sorbo a su bebida —. Si que es un maldito problema, nunca imaginé que Böttcher tuviera el valor para contarles su orientación sexual.
—¿Cómo?, ¿Tu sabías que era gay?
—Hermano, Michael y yo tuvimos nuestros encuentros, nada serio solo le enseñe que no podía seguir fingiendo.
Mi ceño se frunció más al escucharlo —. ¿Tu eres gay?
—Bisexual— corrigió.
Menuda mierda, esto solo hacia que mi culpa aumentará más porque estoy seguro que sí esa vez que lo encontré con su novio no le hubiera dicho que a quien tenía que explicarle las cosas era a mis padres nada de esto estaría pasando.
—Es mi culpa.
—¿Que?
—Yo lo separe de su novio porque una vez lo encontré con él y por imbécil le dije que tenía que explicarle a mis padres— me coloque una mano en mis ojos —. Maldición no sabes cuánto me duele escucharlo llorar.
—¿Tenía novio?, Me olvidó tan rápido— hizo un puchero gracioso.
—Si y más apuesto que tú— reí.
—Entiendo— soltó sin importancia —, debe ser muy doloroso para los dos.
—No se que hacer para ayudarlo.
—¿Es de Italia el chico?
—Si.
—¿Que te parece si traemos al chico aquí para que lo vea?
Su idea sonaba genial pero había un riesgo de que mi papá lo viera además el aún no lo aceptaba, mi mamá empezaba a hacerlo después de escucharlo llorar conmigo.
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Zerstörung. [TERMINADA]✔️
Teen Fiction-Los colores del atardecer no tienen sentido si tú no estás a mi lado.- sus ojos azules eran oscuros pero con una increíble chispa de emoción por volvernos a encontrar. -Y mi corazón no late con la misma locura cuando estamos separados.- me acerque...