trece

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Manuel se despertó a eso de las nueve de la mañana mientras que Mateo siguió durmiendo, así que con mucha suavidad se levanto para ir a la cocina y preparar algo pero no sin antes mirar su celular.

Papá

manu, tu mama esta bien, quedate tranquilo

la van a tener aca, sigue durmiendo

pero dice que es mejor que no tenga visitas

quedate en casa

esta bien, pa

mandale un beso

Vio que tenia mensajes de Valentin pero ni siquiera quería leerlos, así que empezó a tostar pan para comer con queso Finlandia, y un té.

— Buen día — dijo Mateo dormido y con la voz ronca

— ¿que haces despierto? de seguro estas re cansado, anda a dormir, Teo —

— no, no, tranqui — le dio un beso en la cabeza ya que estaba sentado y después fue para el baño, dejando a Manu con una sonrisa.

valen

manuuuu

manu

manuuuuuuuuuuuuuuuu

¿que queres, Valentin?

estas enojado?

¿acaso hiciste algo para que me enoje?

no, creo que no

¿entonces? no veo por que estar enojado

pero lo que paso...

ya lo hablamos, dijimos que era una "decepción mutua."

que feo ponerle ese nombre...

pero así fue.

me alegro que te hayas llevado bien con Dani

es un buen pibe

a

si, 

eso

gracias(?)

mateo tenia razón, se iban a llevar re bien ;)

mateo te quiere re dar.

ya lo se

¿y que tiene? quizás él lo dice de verdad

habiamos dicho que era "decepcion mutua"

que feo ponerle ese nombre...

...

volvió mateo, chau

ah bue

— ¿que pasa que tenes esa cara? — dijo mirándolo

— nada, peleando con Oliva, pero no importa — bloqueó el celular y lo dejo arriba de la mesada para después alcanzarle una taza de té a Mateo — ¿dormiste bien? —

— Como no voy a dormir bien si tenia un ángel al lado mio — rió al ver la reacción de Manuel — perdón pero ahora que lo sabes me re cuesta guardarme las cosas — cambió de tema — ¿tu mamá que onda? —

— papá dijo que no vayamos, así que si queres recuperamos el domingo pasado — 

— Me tengo que ir, tengo cosas para hacer — hablo serió y la cara  de Vainstein cambió por completo — era joda — rió — ¿viste que no es lindo? gil —

Ese domingo Mateo se tomo el día para mostrarle a Manuel su verdadero él, lo que le gusta, lo que lo apasiona, sus sueños, y todo para que el rapado pueda animarse a abrirse también un poco.

— Un poco ambicioso pero me gusta — habló Vainstein después de escuchar a su amigo, se metió otro tenedor de fideos en la boca y espero que el otro siguiera hablando pero solo se encogió de hombros — ¿te puedo hacer una pregunta? — asintió — ¿por que te gusto? — Mateo se atraganto y Manuel moría de la risa al ver eso, Palacios estaba deleitado

— ¿te soy sincero? no se, Manu, no se como expresarlo en palabras — hablaba mientras trataba de limpiar el agua que sentía en la nariz

— quizás por que no me conoces lo suficiente — empujo suave el plato para delante y se recostó, ya no tenia hambre

— Te tengo re fichado, no como el otro gil — rió — me acuerdo el primer día que te vi, creo que recién estabas rapado, quizás por eso te vi, pasabas desapercibido, pero estabas re lindo ese día  — expresó sin mirarlo

— ¿por que no me hablaste antes? ahre que soy re ortiva — rierón

La tarde transcurrió en jugar a las cartas, al ajedrez, estar tirados bajo el sol, tratar de que Manuel se tire un free, y llegó la hora de irse cuando los padres de este volvieron.

— Chau, Matu, gracias — lo abrazó en la puerta, su contrario tardo en reaccionar pero cuando lo hizo lo abrazó fuerte

— Gracias a vos — se saludaron con un beso en la mejilla y este fue hacia al auto donde estaba Pedro con el celular pero cuando lo vio lo guardo

— ¿tu mamá todo bien? — pregunto asomándose por la ventana, y Manuel asintió — cualquier cosa nos llamas — dijo antes de arrancar, segundos después vio como el auto se iba, teniendo de nuevo ese sentimiento de vacio.








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