cuarenta y siete

304 41 21
                                    

Manuel se levanto en la mañana, estaba físicamente cansado pero muy feliz por alguna razón, agarro su ropa para empezarse a cambiar; Mateo le echo una mirada y sonrió para después seguir durmiendo, Vainstein nunca se dio cuenta. Salio de la habitación y se encontró con Pedro tomando café el cual le ofreció uno, los dos tranquilos empezaron a desayunar, eran como las nueve de la mañana.

— ¿Hoy tiene algo que hacer? estaba re cansado ayer — Pedro negó — mejor —

— Quédense hasta la hora que quieran, Emi tiene llave — expreso y Vainstein sonrió en forma de aprobación, se quedaron en silencio un rato hasta que el rapado volvió a hablar

— ¿no va al colegio hoy? —

— desinfección — contesto y rieron

— ¿le puedo pedir una opinión? — pregunto y Pedro asintió, le generaba cierto nerviosismo pero siempre iba a estar para ese par — Ayer tire así por decir el hecho de empezar a construir, digo, una casa por acá, ¿que piensa? obvio que no ahora y que cuesta bastante pero creo que es una buena idea —

— Me parece muy bien, yo creo que como vienen las cosas después de que se lance truenomerch van a poder — hubo un silencio y después Pedro se levanto — ya me tengo que ir, nos vemos, Manu — saludo y este movió su mano en forma de saludo. Después de un rato largo escucho el sonido de la baño hacia que supuso que Mateo se estaba bañando, minutos después pudo corroborar que fue así

— no tengo ganas de ir a casa, hace mucho no vengo, la extrañe — dijo tirándose en el sillón, ya estando vestido

— si queres nos quedamos.. así Emi no se queda solo — su contrarió asintió — ¿queres desayunar? —

— ¿vos comiste algo? digo para ir a comprar unas facturas o que se yo, me desperté con ganas de algo dulce —

— tome solo café, así que anda y yo pongo el agua — dijo mientras se levantaba, Mateo salio de la casa y Manuel se quedo pensando en lo que le había dicho, era verdad, esta casa se extrañaba, en esa casa habían pasado casi toda su relación, tenían muchos recuerdos lindos, ¡Ay! si las paredes hablaran.

Mateo volvió dejando el paquete arriba de la mesa, el mate ya estaba listo así que empezaron a tomar, los dos se encontraban en silencio, como si no supieran bien que decir, como el primer almuerzo ah.

— Me gusto lo que dijiste ayer, de venirnos a vivir por acá — menciono — podríamos tener una casa que de afuera este pintada de amarillo y azul, que tenga graffitis que digan "columna cuatro" y "manucho conflicto" — Manuel rió al escucharlo — total, si después nos cansamos se pinta y ya —

— es verdad..., igual, Emi tiene razón, ¿vamos a vivir siempre juntos? — 

— si fuera por mi la verdad.... —

— ¿si fuera por vos? ¿que? a ver, decilo Mateo — pidió de una y el nombrado se le acerco para darle un beso

— si fuera por mi me quedo toda la vida junto a vos, mi amor —































owwwwwww












Simpleza - trueplikDonde viven las historias. Descúbrelo ahora