Los locos Romanoff [#4]

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—AJ, brillas como el sol en la mañana, mi hijo~...—Peter tarareaba mientras que mecía al bebé en sus brazos con cuidado.—¡Miren a mi hijo! "Orgulloso" no es la palabra que busco... hay mucho más dentro de mí...

MJ sonrió enternecida y medio-dormida, viéndolos desde la cama.

—Creo que ya se durmió.—Susurró Peter mientras que, con cuidado, lo dejaba en la cuna para luego acostarse al lado de MJ.

—Tal vez el que le cantes canciones de Hamilton es lo que logra calmarlo.—MJ acostó su cabeza en el pecho de su esposo.

—Entonces empezaré a hacerlo más seguido. Aunque creo que solo llorará más cuando llegue a "Burn" y "Stay Alive".—Ambos rieron entre dientes y luego escucharon llantos de parte de AJ.—Ahí va otra vez...—Ambos suspiraron. MJ se levantó, pero Peter con un gesto le indicó que no lo hiciera. Él se levantó, fue hacia la cuna y tomó a AJ en sus brazos, sentándose en el borde de la cama y empezando a mecer a AJ suavemente en sus brazos.

Peter empezó a cantar algo en el segundo idioma de los dos. MJ lo miró enternecida mientras que él cantaba aquella canción de cuna con una voz dulce y suave y AJ poco a poco se calmaba hasta quedarse dormido. MJ sonrió viéndolo.

—¿Fue eso una versión rusa de Itsy Bitsy Araña?

—Mamá me la solía cantar, cuando era niño y tenía pesadillas...—Peter se encogió de hombros y rió entre dientes. MJ le besó la mejilla.

—Tal vez sea eso lo que logre calmarlo.—Ambos suspiraron. El ser padres era agotador, pero eran un equipo en esto. De la misma forma que siempre habían sido un equipo en todo.

Peter sonrió de manera cálida mientras que veía al pequeño AJ entre sus manos, y sabía que ahora entendía. Entendía cómo se había sentido su madre Natasha, aquel fuerte sentimiento que Natasha siempre había tenido sobre proteger a su hijo, cuidarlo de todo, y jamás dejar que algo le pase. Ahora Peter entendía, porque él se sentía así sobre AJ.