1ྉBúscate una novia Jeon

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— Dale, no seas malo hermanito. Déjame ser el padrino — pidió sacando sus ojitos tiernos (su arma secreta)

— ¿No se supone que yo sea el que te lo pida? — el mencionado se cruzó de brazos encarando una ceja.

Es cierto que aún no habían decidido el padrino de su hijo, ya que su llegada fue inesperada.

— Es que mira a Taewon, me pide a gritos que  lo sea — el pequeño bebé, sin entender nada, balbuceó sonriéndole al omega.

No era que no quisiera, pero apenas y había salido de la universidad.

— Jungkook, ya decepcionaste bastante a tu familia cuando te presentaste como Omega y más siendo escritor que solo algunas personas leen sus obras_

— Acabo de graduarme hyung es obvio que aún no tenga fama. ¿A qué quieres llegar?

Le faltaba algo, necesitaba algo y eso era una relación. Jungkook necesita un cambio de aire.

— Busca pareja y cásate, así te dejaré que seas padrino de Tae — el pequeño giró su cabeza al escuchar su nombre y alzó sus manitas en dirección a su padre, el cual lo tomó y besó su frente con amor — Pero, debes hacerlo antes de que yo y Minha nos casemos, tienes un año y medio para eso

Taemin y Minha tuvieron a su bebé como un accidente en el pasado celo, claro, aman a Taewon y no pensaron nuca abortarlo. Lo hecho, hecho está. Al nacer el pequeño, decidieron esperar a que al menos el niño caminara para la boda

— Pero hyung¿Quién se va a querer casar conmigo? — dijo señalándose como si fuera la cosa más fea del mundo.

— Jeon Jungkook eres un Omega fuerte y también haces ejercicio, lo único que tienes que hacer es ir por ahí y enseñar tus abs — el Omega encaró una ceja — Vamos, tu escencia es irresistible, hay que ser alfa estúpido para no caer rendido a tus pies — dijo con los ojos bien abiertos, demostrando su sinceridad.

El pelinegro era un chico sencillo y bien educado. Su cuerpo era de ensueño. También fue el número uno en la escuela ¿Qué más podía pedir?

— Entonces te estás diciendo estúpido a ti mismo — rió cubriendo su boca

— Creeme, si Minha no me trajera loco desde la primaria hubiesemos tenido algo — dijo sincero.

Minha, su novia. La amaba demasiado y no la cambiaba por nadie. Desde niños eran inseparables.

— Te he escuchado Park Taemin — apareció la Omega.

Traía puesto una bata para dormir que cubría su cuerpo. Su cabello se movía al son de sus pasos, embobando a Taewon enseguida.

— Amor, estás en celo, te dije que esperaras arriba a que Jungkookie se fuera — dijo y entonces el pequeño al estar tan cerca de su padre apretó la nariz evitando que respirara — Gracias hijo, has evitando que salte hacia tu madre y me la coma entera — el niño ladeó su cabeza sin entender.

Unos pasos más y ya se encontraba junto a Jungkook dándole un abrazo pequeño.

— Kook, bajé para ver si podías llevarte a pasear un rato a Taewon — pidió la mujer

Tanto el omega como el alfa abrieron sus ojos como platos, sorprendidos por la oferta. A uno le agradaba y al otro no.

— ¿¡Cómo!? — ambos hablaron al unísono.

El bebé de apenas unos meses se sorprendió ante el grito, pero no se asustó y aplaudió como si de una obra de teatro se tratara.

— ¿¡De verdad!? — a Jungkook le gustó la idea.

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