TOMA 9

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FLASHBACK

-Arata, ¿qué noticias me tienes?

-No es algo seguro Usaka, pero acabo de recibir un reporte. Encontraron a un hombre tirado en un parque, de entre veinte y treinta años de edad, uno con setenta y cinco metros aproximadamente, delgado, cincuenta y cinco kilogramos, tez clara, cabello oscuro. Fue trasladado de emergencia al hospital universitario, me dirijo hacia allá en este momento.

Usaka tragó saliva - ¿Por qué no es seguro que sea él?, su rostro es inconfundible... ¿cuál es su estado? – se animó a preguntar.

-Mira... su rostro se encuentra muy herido por lo que no se le pudo reconocer de esa forma, pero de acuerdo con las características físicas que me dijiste, estas coinciden con Saijo san. En cuanto a su estado... mejor que eso te lo explique un doctor, yo solo te paso la información tal cual la recibí... quisiera hacerte otra pregunta ¿Cuál es su tipo de sangre? Eso también ayudará a identificarlo.

-No le pudieron reconocer... - Usaka repasaba en su mente esas palabras - Es "A", su tipo de sangre es "A" te veré en el hospital, estoy muy lejos, llegaré en una hora... Por favor, si llega a ser él, protege su identidad.

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-Usaka san, ¡USAKA SAN! – Junta elevó la voz para que este le respondiera - ¿Qué le pasó a Takato?, ¿a dónde vamos? – demandó respuesta.

El de anteojos seguía un poco perturbado por la noticia recibida, sin embargo, sabía que debía recobrar la compostura y pronto, pues no sabía a qué se enfrentarían una vez llegando al hospital. Lo primero, incluso antes de confirmar si era Takato o no el paciente ingresado, necesitaba preparar a Junta, puesto que no tenía ni idea de cómo podría reaccionar, también no dejarse ver tanto por el personal o pacientes que pudiesen encontrarse en sala de espera, no podían arriesgarse a crear más escándalo del que se vislumbraba caería sobre ellos. Su cabeza era una maraña de pensamientos de acciones a emprender y sus manos no dejaban de temblar, hasta que la voz del castaño le sacudió.

-No es seguro que sea él, vamos al Hospital Universitario... al parecer ingresaron a una persona con características similares a Takato – tomó aire y continuó – no pudieron identificarle a simple vista debido a las heridas que presenta...

En ese momento Junta se tensó por completo, cómo era posible que algo así hubiera pasado, qué tan mal estaba como para que no le identificaran. Un vacío en su estómago se formó y las ganas de vomitar le vinieron de golpe al solo imaginar que su amor estuviese lastimado.

Usaka continuó hablando - de ser él, quiero que me escuches con atención lo que haremos...

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-Hemos llegado. ¿Dónde te encuentras? – demandó Usaka.

-Habitación 115 cuarto piso. Usaka... - el policía hizo una pausa y continuó – sí es Saijo san la persona que ingresó.

En su interior Usaka había experimentado la terrible sensación de que efectivamente la persona encontrada sería él, pero ello no aminoró ni un poco el terrible impacto que la confirmación le había causado. Un espantoso escalofrío le recorrió su nuca – ¿Te encuentras con él ahora? – se animó a preguntar, giró su rostro al sentir la mirada profunda e impaciente de Junta sobre él.

-No, en este momento se encuentra en el quirófano. Solo ven aquí, hablemos cara a cara.

El hombre cortó la llamada, sostuvo el celular y con su mano izquierda acomodó sus lentes – Azumaya, debemos dirigirnos a la habitación 115... solo sígueme, no podemos seguir exponiéndonos. Sí es Takato... maldición, maldición... – fue lo único que se animó a decir apresurando sus pasos hacia el elevador.

EL PAPEL DE MI VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora