TOMA 16

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Confusión, rencor, desesperación, pero sobre todo la ira era el sentimiento que imperaba dentro del coche. Cada segundo avanzado era como si una soga invisible pero molesta rodeara su cuello y fuera apretando poco a poco hasta asfixiarlo.

-¡Con un demonio! Te estoy preguntando que carajos fue lo que pasó. ¡Tú, tú debiste prever esto! – gritaba histérico apuntándole con dedo inquisitorio.

-Kuroo kun ¡tranquilízate! No puedo siquiera concentrarme. Crees que no soy consciente de esto. Mi maldito celular no ha dejado de sonar tanto como el tuyo.

-¿De dónde demonios salió todo esto...? ¿quién fue? – gritó golpeando el asiento – en cuanto lo sepa, ¡te juro que lo destruiré!

-¡Silencio!, debo recibir esta llamada. Habla Takuya... vamos en camino Presidente. Sí, yo le diré – el manager agarró aire, frotó el puente de su nariz y miró por el retrovisor – Apaga tu celular, a partir de este momento cualquier declaración ya sea en redes o frente a cámaras deberá pasar por la aprobación del Presidente.

Ante tal petición, el sonido de un fuerte y profundo resoplido fue la respuesta. De a poco el ambiente tenso pasó a letárgico. Ambos hombres repasaban aún incrédulos los acontecimientos que momentos antes se habían suscitado. Había sido un ataque en despoblado, granizo en cascada y ellos sin un solo paraguas para resguardarse; El objetivo: Madarame Kuroo.

UNA HORA ANTES

-¡Buenas noches tengan todos ustedes! Hoy en "Noche con las estrellas" tenemos un invitado de lujo, quien actualmente se encuentra en un nuevo drama del cual nos platicará en breve. Recibamos con un gran aplauso a ¡Madarame san! – anunció la conductora.

Como siempre la elegancia en cada movimiento le acompañaba, la sonrisa confiada, la mirada astuta y su impecable vestimenta robaba miradas al pasar. Con marcha moderada llegó hasta donde la mujer le esperaba, tomó asiento y saludó hacia la cámara.

-Madarame san, un gusto tenerlo con nosotros.

-El gusto es mío, tenía ya... ¿qué sería, un año y medio que no me invitaban? – preguntó sonriente.

-¡Oh! Vamos, no lo diga así que nos hace ver como los malos. Es solo que su agenda no se lo permitía – justificó la mujer.

-Claro, tiene toda la razón. Lo bueno es que ya estoy aquí – sonrió.

-Así es Madarame san. Ahora, me gustaría antes de comenzar a hablar de su nuevo drama, hacerle un par de preguntitas un tanto privadas – expresó con voz pícara.

-Cómo les encantan estas estupideces... - pensó fastidiado - Adelante, soy todo oídos – respondió gustoso.

La mujer repasó rápidamente sus tarjetas y comenzó a dar lectura a estas.

-Madarame san, sabemos que durante la grabación de su película se hizo cercano a Saijo san, al cual mandamos un enorme saludo y deseamos verlo pronto en la televisión – pronunció la conductora mirando a la cámara, para después enfocarse en el entrevistado – Usted, ¿ha tenido contacto con él en todo este tiempo?, ¿sabe cuándo volveremos a verle actuar?, ¿cómo ocurrió el asalto? – soltó impaciente.

-Bueno, esas son muchas preguntas, pero con gusto las contestaré – soltó a la par que se acomodaba mejor en su asiento y pasaba sus dedos por su cabello. – Sí, he tenido contacto con Takato san, de hecho, somos muy buenos amigos y solo diré que está muy bien. Recuperándose, es muy valiente y fuerte. Le dio guerra al asaltante, y sé que puedo parecer disco rayado, pero eso solo hace que le admire más – dijo colocando ambas manos en su pecho.

EL PAPEL DE MI VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora