Al día siguiente, luego de haberse despedido de Seojoon, YoonGi se prepara y se encamina a su trabajo. Debía admitir que no pudo descansar bien durante la noche debido a lo ocurrido. No podía dejar de pensar en lo que había pasado con su amigo.
El blanquecino sabía que estaba mal, pero no lograba entender porque a su cuerpo si le gustó aquello.
Y sí, aunque solo hubieran sido unos roces simples de labios, aquellos lo dejaron con un sentimiento indescriptible, que prefirió ignorar y no darle una mayor importancia.
De todos modos ellos en el pasado eran de esos amigos con cierto derecho, pero se supone que solo quedaría en sus recuerdos aquella etapa donde habían sido jóvenes hormonales, que lo único que querían era diversión y pasar un buen rato el uno con el otro. Aunque claro, su relación no se basaba solamente en el sexo, sino que también se apoyaban y animaban mutuamente como amigos, muy buenos amigos.
Al llegar al edificio del banco, YoonGi estaciona su auto en el estacionamiento de abajo y toma el ascensor para llegar al piso seis, donde se encontraba su oficina.
Luego de haber dejado su cartera, se encamina a la habitación donde solía hacerse café y comer una que otra galleta o queque que solían traer.
Dándole un sorbo a su vaso, se topa con su amigo Jaehyun, por lo cual le dedica una sonrisa.— Hey. —saludó, recibiendo un «hey» de vuelta.
El blanquecino iba a continuar, pero escuchan como una voz gruesa habla y les ordena que se presentaran ahora en la sala de reuniones.
Sí, definitivamente era Minho, su jefe.
Los jóvenes deciden comenzar a moverse para no tener problemas y tomando sus vasos deciden entrar a la habitación grande y sentarse en unos de los tantos asientos.
La sala comenzó a llenarse de a poco y veía como algunos de sus compañeros tenían cara de muertos, lo que le causó una sonrisa, porque sabía que debían estar cansados, ¿y cómo no estarlo? Habían semanas en los que el trabajo era horrible y otros más pasables, pero al parecer esta era una de esas semanas feas y duras.
YoonGi decide llevarse una galleta a su boca cuando ve la entrada y ve a su amigo JiMin, por lo cual alza su mano y le dice que se siente junto a él, ya que tenía el asiento a su izquierda libre.
—Hey, ¿cómo estás? —saluda con una pequeña sonrisa.
—Excelente. —responde, mirándolo.— ¿Y tú? ¿Cómo te sientes?
—Estoy bien. —dice, no dándole mayor importancia a la guerra de sentimientos y pensamientos que tenía desde lo ocurrido.— ¿Desayunaste? ¿No quieres que te dé de mi café? —pregunta, mostrando su vaso.
—Gracias, desayuné. —asiente con una sonrisa, mas toma el vaso de su amigo para darle un sorbo al café y devolvérselo.
YoonGi asiente, apoyando sus manos en la mesa y fijar su mirada en su jefe.— ¿De qué crees que nos hablará ahora? —pregunta a Jaehyun en voz baja.
—Si te soy sincero, no sé, pero espero no nos de trabajo extra. —ruega, mirando al chico al otro del blanquecino.— ¿Y él? —pregunta.
—Él es JiMin. —presenta YoonGi haciendo que el nombrado le mirara y luego se fijara en el chico al lado de su amigo.— Llego ayer y al parecer Minho no lo presento y no nos dijo nada sobre ello.
—Jaehyun. —se presenta, extendiendo su mano para estrechar la del empleado nuevo.
—JiMin. —devuelve la introducción, soltando la mano posterior a ello.
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짐슈 Amantes » jimsu.
Fanfiction❝YoonGi sólo quería sentirse amado y deseado por su pareja, pero esto se fue desvaneciendo con el tiempo y la chispa que existía entre ellos se fue apagando, dando paso a que nuevos sentimientos comenzaran a florecer por su compañero de trabajo. Ent...