We Couldn't [2] [Seungcheol]

1| No existen las almas gemelas

"Los encuentros inesperados son los que más esperamos"

××××

Los Ángeles, California.

—Ya está la cena, princesa. —anunció Mingyu.

—Ya voy. —se escuchó desde la habitación.

Para sellar aquella decisión importante en sus vidas, Mingyu propuso tener una cena.

Mientras Mingyu servía la comida, levantó su mirada, una enorme sonrisa se formó en su rostro al ver a Lim frente a él. Ella se veía hermosa, siempre lo hacía, pero el vestido color morado la hacía lucir resplandeciente a los ojos del moreno.

—Te ves hermosa. —dijo él aproximándose a la chica.

—También te ves bastante guapo. —dijo ella acomodando la corbata de Mingyu.

Él la tomó por la cintura, apegandola a su cuerpo.

—Me alegra que estemos juntos. —Mingyu sonrió.

A ella también le alegraba, ¿cierto?

—A mi igual. —dijo rodeando el cuello del moreno con sus manos.

Sabía que no debía engañarlo, pero más que engañarlo a él, se engañaba a si misma.

—¿Nos sentamos? —propuso él.

Ella asintió y ambos se separaron.

Tomaron asiento, Mingyu al pie del pequeño comedor y Lim a su derecha.

Estar al comedor sin Choi se sentía igual que estar sola. Durante todos estos meses, Lim se había preguntado si ella había sido bastante injusta, escuchó las explicaciones de Choi, pero realmente no les tomó demasiada importancia, tal vez ella se había equivocado.

—Esta delicioso. —dijo ella con una sonrisa.

Sin importar las dudas que rodearán su cabeza, ella ya había decidido.

—¿En serio? —él colocó su mano sobre la de la chica. —Como en los viejos tiempos, ¿recuerdas? Cuando mamá murió, tu tía prácticamente me adoptó, lo que hizo que ambos nos hiciéramos más cercanos aún.... ahí fue cuando...

—Dijiste que me amabas. —la chica lo miró. —Dijiste que esperarías por mi.

—Así es. —dijo él.

Sabemos lo que Lim piensa, pero, ¿qué hay de Mingyu?

Sabía que ella aún pensaba en Choi, pero él hizo una promesa, esperarla. Si se rendía ahora, todo el esfuerzo anterior habrá sido en vano. Aún así, el rostro y la voz de Lizy rondaban por su cabeza.

—Y aquel día, en que Hansol se fue con Lisa, tú saliste, recuerdo que me dijiste que si él volvía a hacerme llorar lo golpearías. —soltó una pequeña risa. —Y lo hiciste, justo después la....

—¿Puedes parar ahí? Deja que me vea como un héroe. —hizo un puchero.

Flashback.

—¿Quien demonios eres tú? —dijo Hansol.

—Mingyu, no vengas, ve al edificio. —dijo Injae limpiando sus lágrimas.

—Ah, eres el chico con el que se mete Injae. —escupió con odio.

—¡Cállate! Infeliz. —Mingyu se aproximó a la pareja.

—¿O qué? ¿Que hará un estúpido chico como tú? —tomó el brazo de su novia. —Vámonos. —jaló el brazo de Lim.