2| Ganaste

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"Te juré que te superaría, pero todas las noches te miraba en línea, incluso te vi escribiendo por horas, pero tus palabras jamás llegaron a mi".

×××××

Los Ángeles, California.

Y si, ¿ambos querían regresar? Mingyu estaba cumpliendo su sueño, la vida que planeó junto a Lim tanto tiempo. Tal vez no bajo las circunstancias que esperaba, pero a fin de cuentas estaba con ella.

—¿Se recuperó? —preguntó Mingyu.

—¿La leucemia? —Jun lo miró. —Sí.

Mingyu suspiró, estaba aliviado.

—Eso es todo, no volveré. —Mingyu se dirigió de nuevo a la puerta.

—La gente puede morir de un corazón roto Kim, más si es débil. —habló Minghao. —Aquí esta nuestra tarjeta, estaremos toda la semana por la ciudad, dudas o peticiones, ahí están nuestros números. Andando, Jun.

Ambos chinos se alejaron.

Mingyu se dirigió a la pila de cajas donde estaba tarjeta, la tomó y la guardó en el bolsillo de su pantalón.

—Señor Kim, los dumplings. —lo llamó un chico.

—Si... enseguida voy. —dijo él.

Sin importar que tanto querían regresar, ambos pintaron su línea.

×××

Ambos chinos se subieron a su auto.

—Llevamos aquí semanas, una semana más no hará la diferencia. —se repetía Jun una y otra vez.

—Tranquilo. —colocó su mano sobre la de él. —Regresaremos con ambos, estoy seguro. —retiró su mano.

—Ambos quieren regresar, pero no quieren dejar al otro. —Jun encendió el auto.

La puerta trasera de éste de abrió y ambos voltearon, sacaron sus armas y apuntaron.

—¿Me olvidaron? —habló él acomodando su cabello.

—Nunca debes entrar así al auto de portadores de armas. —dijo Minghao.

Ambos guardaron sus armas.

—¿Recién llegaste? —preguntó Jun.

—Algo así, Choi esta empeorando, por eso vine a Los Ángeles, para hacer el trabajo que ustedes dos no pueden hacer. —dijo él cruzando sus piernas.

—¿Disculpa? —Minghao lo miró. —No me obligues a sacar de nuevo mi arma.

—Mingyu trabaja en el restaurante de la esquina, eso supongo ya lo saben. —dijo él. —Sobre Lim, trabaja en una oficina, es la recepcionista principal, la oficina está a unas cuadras de aquí, ahí es a donde iremos.

—Nos adelantamos, Lim esta aquí. —dijo Jun.

—Lo sé, es trabajo en una oficina, sus datos deben estar ahí. —suspiró. —¿Comenzaran a manejar? O, ¿También tengo que hacer eso?

We Couldn't [2]  [Seungcheol]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora