Nueva vida

Extra 3 ✔

            25 de septiembre, esa fecha siempre quedaría grabada en la mente de cada una de las personas que se encontraban reunidas en la casa de Austin y Logan. Ese día les habían dado la custodia temporal de los chicos, mientras iniciaba el trámite de adopción. Aún los evaluaban constantemente, pero ni a Austin ni a Logan les importaba eso, ellos estaban felices de poder ser padres de esos tres preciosos niños, y siempre estarían agradecidos por la ayuda que Olivia Baker les había brindado.

Ese día la familia Baker, Everthart y Clark se encontraban reunidos, Austin y Logan ya habían ido por los niños y ya les habían mostrado cada rincón de la casa, los mellizos tenían nueve meses y Evie aún seguía con cinco años. Los dos mayores estaban nerviosos por el comportamiento de la niña, ella solo se aferraba a la mano de Logan, solo hablaba con él en escasas oportunidades, no lograban que hable con nadie más, ni siquiera con Austin, pero estaban seguros que en algún momento esa hermosa niña iba a generar la confianza suficiente para poder entablar un vínculo con Austin, quien ya la amaba con el alma y moría por verle al menos una sonrisa, desde que la conocían no había sonreído ni una sola vez, ni siquiera cuando le dijeron que los tres se irían del internado donde estaban para irse con ellos. Evie siempre estaba pendiente de sus hermanitos, nunca se despegaba de ellos, y solo dejaba que se acerque a ellos Austin y Logan, eso en el internado le había traído muchísimos problemas, pero ella siempre iba a defender a sus hermanitos.

-Evie – Logan se agachó a la altura de la niña que lucía un precioso vestido rosado, unos zapatitos marrones, y llevaba su pelo castaño recogido en dos colitas – estás preciosa cariño – ella recorrió con sus ojos verdesa su atuendo y le regaló una pequeña sonrisa de boca cerrada a Logan – En un ratito van a venir nuestros amigos, ellos van a ser tus tíos y los de tus hermanitos ¿sí? – Austin suspiró cuando vio el terror en la mirada de la niña, tenía la necesidad de abrazarla con fuerzas y hacer lo imposible para borrar todos sus malos recuerdos.

-Ellos son personas buenas cariño, nadie les va a hacer daño a ninguno de ustedes dos ¿sabes? Nosotros vamos a cuidarlos para siempre, ya nadie les va a hacer daño – le dijo con amor, mientras alargaba una mano para poder acariciar una de sus mejillas, pero ella dio un paso atrás con miedo, arrancando una mueca de dolor de la cara de Austin.

-Ya lo va a superar – le susurró Logan a Austin - ¿sabes? Tus tíos tienen un montón de hijos, estoy seguro que vas a estar encantada de jugar con ellos – Evie los miró por unos segundos, para después asentir y caminar hacia el cochecito donde se encontraban sus hermanos, se agachó para tomar el juguete que había lanzado Tyler y se lo dio.

-Ty-Ty no debes tirarlo, no queremos que se enojen – lo regañó la niña, y su hermanito solo rió y lanzó nuevamente el juguete, divertido con la situación. Evie solo puso cara de horror y corrió a recoger el juguete.

-Evie, es solo un juego, a él le divierte tirar su juguete para que tú se lo alcances, nosotros no vamos a enojarnos – le explicó Austin y ella lo miró, desconfiando de su palabra – Te lo prometo – insistió Austin, y sonrió cuando la pequeña castaña le entregó su juguete a su hermanito. Pasó algunos minutos recogiendo los juguetes que le tiraban sus hermanitos y devolviéndoselos, para repetir la acción, hasta que se aburrió y caminó hacia donde estaba Logan para pararse a lado de él.

-¿Quieres que juegue contigo? – le preguntó Logan y ella solo negó con la cabeza - ¿Quiere algo de tomar o comer? – Volvió a preguntar y ella volvió a repetir su acción – Cariño, necesito que me hables para saber que deseas.

-No quiero molestarte – le susurró.

-Tú no me molestas – Logan la tomó entre sus brazos y ella se refugió en su pecho.