Sucesora

25. ¿Trato?.

- Ese poder, ¿puedo llegar a tener ese control sobre el agua si logró controlar la magia del planeta?

Horda Prime, en la mente de Adora, observó completamente fascinado por lo que había logrado Mermista, aunque esta molesto por haber perdido la batalla, el tener presente esa información le hace explotar su mente imaginandose tener en sus filas una versión de She-Ra tan poderosa.

- Necesito más información.

Sus ojos notaron como varios soldados estan de camino al castillo.

- ¡Je!, hora de salir en escena Adora -sus ojos empezaban a perder el tono verde. - Eres mi nueva Aurora... Por unos días.

Nuevamente, el cuerpo de la heroína cayo al suelo incosiente, en la espera de la ayuda.

(...)

- ¡GANAMOS!.

Se escuchan gritos de celebración por todo el reino, que lograban llegar entre la lluvia a oídos de todos, lluvia la cual empezaba a bajar.

- Parece que te ven como una celebridad -añadió Bow.

Mermista observo como todos los soldados dejaron su mirada y aplausos en direccion a ella.

- Ojalá pudiera disfrutar de esto con Frosta -respondió algo deprimida.

- Si quieres te llevo con ella, que de paso me tengo que encontrar con Glimmer en el mismo lugar.

- Si, como que seguramente tengo fracturas por someterme aguantar tanto peso, así que de todas formas me tienes que llevar -respondió algo burlona, pero manteniendo un matiz deprimido. - Por cierto, ¿qué se hizo Entrapta? -intento buscar a la princesa.

- Seguramente haciendo cosas de Entrapta -respondió también burlón. - Tranquila, seguro está con Kyle.

Los dos caminaron por unos minutos entre la multitud hasta por fin llegar al hospital del reino.

- Espera -mencionó Mermista.

Bow dejo de caminar y volvio a ver un momento a la princesa, la cual tiene un rostro temeroso.

- Es que... No me siento preparada -se fijo un momento en su ropa, aún tenía una tenues manchas rojas. - Pensaba mil cosas en esta guerra, pero... Nadie te dice que tienes que cargar a tu amiga, mientras se está desangrando, debajo de la lluvia y...

Mermista se empezó alterar un poco.

- Ya -dijo con un tono preocupado Bow. - Si quieres venir tu sola más tarde, lo entiendo.

- No... -volvió a ver al edificio algo temerosa. - Vamos.

Mientras caminan. Bow podía sentir los nervios brotando de Mermista, aquella mirada perdida en el suelo como si estuviera experimentado de nuevo lo que sucedio hace poco. El arquero se siente super mal, ya que él no puede hacer nada para que Mermista se sienta mejor. Reconoce esa sensacion, ya que con sólo el haber experimentado que iba a perder a Glimmer le traumo... El imaginarse a Mermista corriendo bajo la lluvia, con el cuerpo de su moribunda amiga y gritando para mantener consciente a Frosta. Todo eso le intimida, sabe muy bien lo que sufre Mermista y no puede hacer casi nada para mejorar. Lo unico que puede hacer ahora mismo es caminar al hospital esperando a Frosta siga con vida.

Los dos ingresaron al mencionado hospital, cada vez Mermista se nota más pálida por el miedo y entrelaza los dedos con rapidez para tratar de bajar los nervios y aquel nudo en la garganta que se empieza a formar.