Cap 38. ¿Inocente?

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En la cocina encontró a todos, Noah sigue irradiando enojo por todos lados pero ya no está esposado tiene la mirada en el teléfono, Andrew luce cansado y al borde del desespero, Lia solo mueve la comida en su plato sin comer nada, Dilan también está entretenido en su teléfono mientras come, Benicio está comiendo junto a Naim, Benjamín me pasa por un lado y se sienta con ellos.

— ¿Donde esta Poe? — Pregunto al notar su ausencia.

— Afuera. Dijo que revisaría algo — Responde Lia.

— Quería revisar a los escoltas junto a Asier — Aclara Naim, asiento lentamente y camino a la sala pero Naim me detiene y con diversión en sus ojos niega con la cabeza, me toma de la cintura con ambas manos para sentarme en su regazo.

— Tienes que comer algo, Sturm — Me susurra sosteniéndome para que no pueda escapar, Benicio me pasa un plato con Pan, huevos y algunos vegetales, juego un poco el plato pero terminó aceptando y comiendo.

Al terminar ayudo a lavar los platos, Noah me mira fijamente sin expresión alguna por lapsos de tiempo y luego vuelve a mirar su teléfono, no me da buena espina que estén tango tiempo en sus teléfonos y no me volveré a quedar con mis presentimientos, extiendo mi mano en dirección al teléfono de Noah, el me mira con los ojos entrecerrados y el seño fruncido, pero no dice nada y me lo entrega, reviso mensajes y llamadas pero no entiendo nada fuera de lo normal al parecer solo está escribiendo notas sin sentido, se lo devuelvo.

Miro a Dilan quién sigue con su mirada en el teléfono mientras escribe, toco su hombro para llamar su atención, me mira confundido cuando señaló su teléfono.

— Que le des el teléfono, idiota — le aclara Noah mirándolo con aburrimiento.

— ¿Y por qué haría eso? — pregunta, mostrándose aún más confundido.

— Necesito revisar algo por seguridad — Aclaro y lo miro con la misma expresión que Noah — Es algo rápido.

— Mi teléfono no tiene nada fuera de lo común — Dice como si fuera lo más obvio del mundo, pongo los ojos en blanco y me acerco más a él sin apartar mi mirada de sus ojos, el me mira confundido pero tiene su atención en mis ojos, está congelado mientras yo solo lo observo.

— ¿Que pasa Dilan? — Mi voz es un susurro provocativo — ¿Que te intriga tanto en la oscuridad de mis ojos?

— ¿Que...? — Luce aún más confundido lo cual me causa gracia, de un movimiento rápido le arrebato el teléfono de las manos, el parpadea varias veces saliendo de su ensimismamiento.

— ¿Que demonios fue eso? — escucho susurrar a Lia.

— Esa fue k — Le responde Benicio con ánimo — no le busques explicación, no la tiene, ella siempre tiene una respuesta pero sigue siendo algo extraño.

Reviso el teléfono de Dilan, en las redes sociales hay un montón de mensajes pero nada fue de lo común, entro a las llamadas y todo normal hasta que entró en los mensajes recientes y veo una conversación con un número privado, la conversación son leves amenazas con llevarse a su hermano pequeño y confirmando que es Sommer, pide fotos de nuestros movimientos a cambio del bienestar de su hermano, el último mensaje es de él número privado y dice:

"Espera mi señal para que me envíes información"

¡Maldición!

Lo mataré. Los mataré a todos.

<Respira> me ordena la vocecilla en mi cabeza.

— ¿Por qué no nos dijiste de esto? — Pregunto con una tranquilidad que podría resultar aterradora para los que me conocen.

Mañana y siempre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora