Cap 9. Segunda parada.

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El frío que se cala por mis huesos hace que me retuerza con fastidio sobre la cama, al abrir los ojos aún veo la oscuridad nocturna en la ventana de mi habitación, me incorporo con pereza para ir al baño, al rodear la cama me percato de la ausencia de Dilan, por un momento pienso que está en el baño pero al verificar no esta.

Tomo una ducha caliente para despertarme, al terminar me coloco un vestido gris casual ajustado al cuerpo y me llega justo a las rodillas, busco en mis maletas y me pongo unas convence completamente negras; Salgo de mi habitación a la cocina para preparar de café antes de ir a despertar a los demás. Cuando llegó a la cocina me sorprende ver a Dilan ya listo, con unos vaqueros negros y un suéter del mismo color.

- Buenos días - Digo desde mi lugar casi es un murmuró causa del sueño.

Él se gira sobre su eje para encargarme y se queda completamente estático, solo me mira siento un escalofrío en el cuerpo al ver como me recorre cada centímetro sin intenciones de disimulo cuando por fin llega a mis ojos se queda un momento allí, yo le sostengo la mirada y siento como si tratara de decirme algo.

- Buenos días - Habla finalmente con la voz ronca y profunda producto del sueño

- Prepare el café - informa haciendo una seña a la cafetera, yo aparto la mirada un momento y le regaló una sonrisa para luego acercarme al mesón de la cocina.

- ¿Eres madrugador o estás emocionado? - pregunto apenas llegó a su lado para servirme un poco de café, él está recostado al mesón y me mira sobre su hombro.

- Digamos que estoy emocionado - responde sin quitarme los ojos de encima, puedo sentir el peso de su mirada muestras preparo mi café.

- A entonces no lo estas - digo aún sin míralo

- Claro que lo estoy, es solo que - parece pensar en si continúa lo que dice o dejar las palabras al aire - No es fácil dormir cuando tienes al lado a una chica con un camisón que le llega a los muslos - continua - y que además, a pesar del frío nunca se arropó.

- Pudiste solo voltear para no distraerte - hablo girando para quedar en la misma posición que el, aún siendo el peso de su mirada.

- Lo dices como si fuera así de fácil.

- Lo es.

- Oh no, claro que no lo es, y menos cuando a mitad de la noche esa chica decidió elevar una pierna para darme un perfecto ángulo de su trasero y sus bragas rojas- apenas Dilan termina de hablar yo me giro para encararlo.

Trato de hablar pero las palabras nunca salen, en lugar de eso siento mis mejillas calentarse.

- Vete a la mierda - es lo único que logró decir antes de comenzar a caminar a las habitaciones, no logro dar más de dos pasos cuando siento como me jala del brazo para hacerme chocar contra su pecho y acto seguido abrazarme.

- ¿Interrumpo algo? - la voz de Nick llega a mis oídos.

- Nada que ver - Le responde Dilan con simpleza, yo me giro para ver a Nick - Quien ya está listo para el día - trato de liberarme del abrazo de Dilan pero me es imposible cuando pasa sus brazos sobre mi cintura para apretarme contra el.

- Buenos días - respondo, rindiéndome de mi intento por liberarme de Dilan.

Nick responde mi saludo y veo como trata de reprimir una sonrisa, al verme a los ojos lo fulminó con la mirada pero eso solo hace que sonría sin poder contener más, luego me guiña un ojo y se encamina a la máquina de café.






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Ya todos estamos listos en la sala con las maletas, terminado de tomar café para emprender nuestro viaje.

Mañana y siempre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora