Capítulo 15

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Estoy muy segura que jamás vuelvo a faltar a clases, por lo menos no una semana, ya que no eh parado de hacer trabajos todos estos tres días desde que regrese para completar las notas que me faltaban y encima tenía que agregar los que dejaron estos mismos días.

-Aaaah, ya me canse -me queje muy bajito mientras me tiraba en la mesa.

América, Sofía, Raúl y yo habíamos decidido sumergirnos por unas cuatros horas a estudiar en la biblioteca y el resultado: estaba muy cansada.

-Por lo menos ya avanzaste todo, solo te falta los trabajos de ayer y hoy -dijo Raúl eso era cierto puse de todo mi esfuerzo en terminar mis trabajos para por fin descansar.

-Gracias por acompañarme chicos -les di las gracias.

Me despedí de los chicos y fui a entregar todos mis trabajos.

Mientras regresaba de entregar los trabajos, divise que ya estaba por atardecer, asique se me vino a la mente el lugar donde e había llevado la anterior ves An y quería ver como se ve el atardecer desde ahí.

Al llegar a la parte del colegio escondida me senté debajo de un árbol y empecé a ver el atardecer había llegado justo a tiempo para ver ese hermoso cielo.

Sin darme cuenta poco a poco me fui durmiendo.

-Let, Let... -alguien me llamaba en mis sueños poco a poco fui abriendo los ojos y...

-¿Que ray...? -me levanté rápidamente sacudiendo mi uniforme -ay lo siento Ah, ¿pero qué haces aquí?

-Siempre vengo aquí a relajarme, se te olvido que yo te mostraré este lugar -eso lo dijo en son de burla.

-Sí eso lo se, no debiste despertarme -me arregle el cabello -estuve estudiando mucho estos días.

-Sí me di cuenta, estuviste corriendo por todos lados para entregar tus trabajos -hizo una pausa y continuó -es normal después de todo decidiste faltar por muchos días, que esperabas.

-Lose, lose, no me des otro sermón.

Estuvimos callados por unos minutos.

-Me tengo que ir -divisé el cielo -ya esta oscureciendo, me voy a los dormitorios.

Cuando decidí dar la vuelta y empezar a caminar una mano me detuvo, mira la mano que sujetaba mi muñeca y seguí con toda la mirada el brazo hasta llegar a los ojos de Antonio.

-Te acompaño -dijo An soltando mi brazo y pasando por mi lado, le empecé a seguir hasta colocarme a su lado.

Caminamos en silencio un rato hasta que llegue a el edificio de mi dormitorio.

-Gracias por acompañarme -agradecí a An. 

Él se fue después de despedirse y me adentre al edificio.

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No puedo creer cómo puede hablar tan rápido, creo que este profesor quiere hacerme un lavado de cerebro, desde que empezó la clase el profesor de química empezó hablar tan rápido, que estoy tan concentrada en captar cada palabra.

-Al pasar de uno a cuatro, a perdido tres electrones si. Sino, recuerden entonces la oxidación pierde electrones y la reducción, gana electrones, ahora al agente de la oxidación se llama agente reductor y a la reducción se le llama agente oxidante, al producto del agente reductor se le llama forma oxidante y al producto del agente oxidante se le llama forma reducida...

O bueno eso es lo que entendí, creo que lo dije mal, pero que importa, y siguió  hablando y hablando, continuó con las clases entrando un profesor, saliendo un profesor, hasta que por fin termino la clase.

Por fiiin...

-Let, quieres ir de compras -preguntó Mer 

-Ay si vamos Let -empezó a convencerme Sofía -recuerda que es fin de semana y hay que invitar también a Raúl.

Sentí unos brazos que me rodearon los hombros y gire un poco para encontrarme con el rostro de Raúl, le sonreí y él a mi.

-¿Y de qué hablaban? -preguntó curioso al escuchar su nombre.

-Las chicas quieren salir y ahora que lo pienso yo también quiero divertirme -le dije

-Aja, quieres ir con nosotros Raúl -preguntó Sofía.

-Sí así seria mas divertido -dijo Mer.

-Pues, si insisten les acompañó -acepto Rau.

 Si me gusta ese apodo, bueno síes que lo es.

-Voy a ser un caballero protegiendo a sus damiselas -el muy chistoso nos agarró a todas en sus brazos y empezamos a caminar al comedor .

Bueno él nos empujaba en con sus brazos y nosotras nos empezamos a reír.

Al llegar al comedor unos ojos se nos quedaron viendo, unos ojos que conocía y que empecé a conocer muy bien.

-Hola hermano, chicos -saludo América

-Hola -dijeron Antonio y sus amigos al unísono.

-¿Por qué tan felices? -preguntó Ian.

-Si hermanita por que tan felices -volvió a preguntar Cristhian, esta vez mientras Antonio me miraba a los ojos para luego desviarlos, me corrió una electricidad.

-Pues ya que es fin de semana, decidimos salir a pasear - le dije mientras cogía mi comida  y empezaba a caminar a la mesa donde nos sentaremos.

Cuando estaba por sentarme Raúl se acercó y retiró la silla, para poder sentarme con facilidad, me senté.

-Gracias Rau -le dije con una sonrisa.

-No hay de que, mi damisela -dijo Raúl haciendo como una reverencia , me reí por su ocurrencia.

-Y nosotras -se quejo América.

-Lo siento chicas pero a ustedes ya les ayudaron cuando iba a hacerlo.

Las chicas perdonan a Rau y comenzamos a comer, con la compañía de los chicos que para mi sorpresa decidieron comer en nuestra mesa.

-¿De quién es el celular? -empezó a sonar un celular, era mío.

-Disculpen -me levanté y me aparte un poco para responder.

-¿Hola? -respondí

-Su alteza, soy el mayordomo real de su hermano -bien escuche quien era, le pedí que me esperara un poco y salí del comedor.

Ya afuera en un lugar seguro para que nadie me escuchara le dije que continuara.

-Le llamó para darle una buena noticia, hoy la reina de Yeil informó a todos los de las familias reales que está embarazada -al escuchar eso me puse muy contenta por mi hermano.

-Dale mis felicitaciones a mi hermano y su a esposa, y gracias por avisarme en vacaciones les iré a visitar, adiós -me despedí y volví al comedor.

Realmente estoy muy feliz, ahora tenemos que aumentar la seguridad para la reina, ya que ese bebé seria el futuro heredero al trono y no solo eso es mi sobrino así que lo voy a proteger.

-¿Quién era? -preguntó Mer muy bajito para que no le escucharan.

En cambio de hablar le mande un mensaje al celular de Mer, ella al verlo, sonrió. No me preocupaba en decirle la verdad ya que de seguro será anunciado pronto a todo el mundo.

Terminamos de comer todos y al final mientras yo no estaba, ellos habían decidido unir también a la salida del sábado a Ian, Cristhian y Antonio. 

Ya veremos mañana cómo termina la salida.



La princesa de la máscaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora