Capítulo 27

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ANTONIO*****

Siempre cuando me llaman por Letizia, termina siendo por que no la encuentran por ningún lado, así que, ya deben suponer que estoy en su búsqueda, pasó por un pasillo cuando empiezo a sentir un poco de una melodía, que no reconozco.

Me acerco a la puerta que estaba medio abierta, la veo ahí con unos jeans y un polo negro, todo de negro junto con su máscara, combinando con su cabello negro, sujeto en una coleta.

La música extraña, pero muy bonita, termina y veo como con sus manos se seca la cara, al parecer estuvo llorando.

De repente empieza con otra música, que está si conozco, me acerco con cautela y me siento a su lado a acompañarla a tocar el piano, en ratos acompañándola con mi voz.

Terminamos y ella voltea el rostro empapado de lágrimas, me duele verla así. Seguimos por un buen rato viéndonos, la luz del sol que atravesaba la ventana se reflejo en nosotros y puede verla hermosa, aun con esa máscara.

Eso la hacia mas especial, y llena de misterio.


LETIZIA*****

Voltee a verle aun con mi rostro lleno de lágrimas, la luz se reflejaba, haciendo alucinante la belleza de la persona frente a mi.

-Creo que me estoy enamorando  -solté.

Así como rápido salió, así de rápido me di cuenta de lo que dije, haciendo que salga corriendo de la sala dejándolo ahí, que bien que estaba con zapatillas seno mi huida hubiera sido frustrada.

Corrí hasta el jardin de la reina, que muy bien cuidada estaba, me detuve ahí y mire hacia el cielo soleado.

Si estarías aquí ya me hubieras acusado de cobarde, no, ahora de seguro ya me lo estas diciendo, me dije mirando el cielo.

Sonreí, hasta yo misma me acusó de cobarde.

Seguro lo dije por que mis sentimientos están alborotados, si eso debe ser.

Si eso es.

Me quedé un momento más mirando las hermosas flores, me agaché y miré una rosa.

Inhalo su aroma, hasta que escuche una voz.

-Por que siempre te tengo que encontrar cuando te pierdes -me congele.

-Esta vez, no me perdí, ni me fui a ningún lado, lejos -dije parándome.

Achine mis ojos para verle mejor, ya que los rayos de luz no me dejan verlo bien.

-No esta vez te encontré y huiste -me regaño, luego lo cambio por un semblante de... -te enamoraste de alguien -pregunto con ese semblante.

Esperen, acaso dijo de "alguien", este es sordo o le falta razonar, le deje bien en claro que me había enamorada de él, o no?.

Ahora pensándolo mejor, solo mencione "creo que me estoy enamorando", no sonó con referencia a él o si?.

Si, una oportunidad para cambiar lo que he dicho.

-Let -creo que me fui por unos minutos.

-Si -dije desconcertada, ay pero que tonta.

-te decía si te gusta alguien -pregunto de vuelta con ese semblante, creo que no se da cuenta de lo que reflejan sus ojos.

-Eeh -que le digo.

 Solté el aire, que sin saber tenia contenido, es mejor decirle la verdad ya que ni siquiera se me ocurre algo para mentir, justo ahora tuvo que vaciar mi cerebro todas mis mentiras, ¿por que?.

La princesa de la máscaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora