Galante Cadaver

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Y mientras Ares pasaba su exilio lejos de Afrodita, Afrodita dio con otro ser que proclamó suyo y encomendó su cuidado a otro ser que se encontraba bajo tierra, pero la muy curiosa en lugar de cuidar sin espiar, miró y todo cayó en la ruina, creció para ser bello hasta una edad en que su propietaria quiso reclamarlo y ya para ese entonces, sus amoríos de una noche, habían retomado, tal vez más posesivo incluso de quererse vengar por lo sucedido, o imponerse sobre ella y si alguna vez existió la ternura en esos momentos quedaron atrás, aunque el placer era el mismo, de ahí surgieron dos más

Deimos y Phobos dos hijos que en cuanto Afrodita vio, los supo de su padre y alcanzó a entregarlos y alcanzar a dudar ella misma de lo que hacía, a Eros lo adoraba como a nadie era el niño de sus ojos, pero esos otros dos seres, eran peligrosos, eran malo... traerían problemas al mundo y si seguía así, no podía garantizar traer bondad al mundo... solo... solo tal vez ruina y tal vez por eso o porque ya se preguntaba cómo estaría buscó a su igual, un bebé que fuera tan bello como ella para darle al mundo solo dotes bellos y colmados de gracia sin la agresividad de Ares y lo encontró, lo encontró y lo amó desde que le vio

Se amaron cada vez que pudieron, a veces incluso le subía al monte Olimpo a su templo dónde declararle el mayor de sus devotos y fue en uno de esos descensos en que el inocente e inexperto muchacho, cayó, herido primero, luego despedazado por el salvaje jabalí, para horror de la diosa que acudió con el primer grito y de ahí, solo pudo gritar por ayuda, clamar a que Artemisa viniera y detuviera o matara a esa criatura, pero en cuanto llegó y Afrodita corrió a implorar por el herido que intentaba en vano huir, Artemisa solo la abrazó, algo balbuceaba Afrodita como para tomarla del rostro y obligarla a mirarla

-No es una bestia, eso no es un animal- explicó cuando ella empezó a intentar golpearla entre gritos de ver como no hacían nada y la culpaba por cada cosa que le pasaba, Artemisa intentó llevársela a de ahí para que no viera, pero no se dejó llevar, así que terminó por delatarle- ¡DEJA DE CULPARME NO HAY NADA QUE PODAMOS HACER, NO LO PUEDO MATAR, PORQUE NO ES UN JABALÍ, ES ARES!- delató dejándola en shock total

Sabiéndose descubierto pudo tomar su forma y que fuera su temible expresión lo último que Adonis viera siendo el grito de Afrodita lo último que escuchara y con el triunfo de ver su vida perdida giró hacia Afrodita y se lo señaló

-Ahí tienes a tu amante, mujer- señaló y tomándole del cuello se lo aventó a los pies para horror de ella y oír a lo lejos el eco de Artemisa diciéndole que ya había sido demasiado- calla, lo será cuando yo lo diga, lo será cuando ella vista su piel y coma su carne- juró buscando la daga que encontró- veamos bajo la piel que tan bonito era- ironizó y alcanzó a empezar un corte en su brazo

-No te voy a permitir hacer eso, ni que ella lo vea- interrumpió Artemisa- ella ya sufrió, ya tienes la venganza que querías, dale sepultura a su cuerpo- intercedió y sin esperar respuesta la llevó de ahí, no por agrado, sino porque igual que él, era guardiana, guardiana de su género y eso estaba siendo demasiado para cualquiera

Ares: Crónicas de una Vida [NO ES HISTORIA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora