FINAL

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Ambos chicos estaban asombrados por lo que acababan de ver, aunque el pelirrojo estaba mucho peor, no dejaba de llorar mientras miraba como el auto se incendiaba, también desde donde estaba se podía ver perfectamente el brazo del castaño fuera del auto.

-No.. yo tengo que salvarlo.-Trató de lanzarse al precipicio pero el pelinegro lo tomó de la cintura con fuerza.-¡¡NO HAY NADA QUE HACER, TAEHYUNG NO PODEMOS HACER NADA!! Él.. se ha ido.-Jimin empezó a llorar.

-¡¡SUÉLTAME, JAMÁS LE DIJE LO QUE SENTÍA!!-Trató de soltarse pero el mayor lo tenía agarrado con fuerza, muchos sollozos escapaban de su boca y unas lágrimas gruesas escapaban de sus ojos.-Tú.. simplemente no entiendes como me siento en estos momentos..

El pelirrojo perdió las fuerzas y cayó al piso de rodillas.-Tú no lo entiendes.. yo lo amaba de verdad, ¿por qué él y no yo?..-Se abalanzó sobre los brazos del pelinegro y terminó de quebrarse.-Todo esto sucedió por mi culpa.. si hubiera tenido las bolas para decirte toda la verdad él estaría vivo..-Sollozo.

-Él te quería muchísimo, hasta te contaba cosas que a mi no... yo también lo amo pero..-También empezó a sollozar, mientras acariciaba el cabello de su contrario.-Esto tiene que ser una pesadilla.. él no puede estar muerto..-Al terminar de hablar, Taehyung empezó a llorar mucho más fuerte sobre el hombro del pelinegro, su llanto era tan desgarrador y entre más lloraba Jimin se sentía mucho peor.

-Jimin.. no creo que pueda vivir sin él.. no puedo, perdóname por favor..-Musitó el menor tratando de secar sus lágrimas, pero entre más las secaba muchas más salían.

-No digas eso.. claro que vas a poder, eres más fuerte de lo que crees.. ¿sí?.. A Jungkook no le gustaría verte sufrir por él, sé que donde quiera que esté querrá que seas feliz..-Jimin tampoco podía dejar de llorar, aunque nadie le creyera aquella muerte le dolía mucho. Después de todo, él fue su primer amor, y el chico que le dio su primer beso. No sería fácil olvidarlo..

-Lo amo tanto..-Volvió a abrazarlo y siguió llorando un rato más, mientras llegaba la policía.

******

Unas cuántas horas pasaron y el doctor salió de cirugía, dando por fin noticias del rubio.

-¿¡Cómo está?! ¿¡Se pondrá bien?!-El pelinegro se acercó a su mayor y lo tomó de la bata, este solo asintió.

-Está estable, pero eso no quiere decir que no esté delicado. Tuvo una hemorragia interna, pensamos que iba a morir.. puesto qué, perdió mucha sangre mientras lo trasladaban hasta acá.

-Entiendo... yo.. ¿puedo pasar a verlo? por favor, necesito verlo y ver que está bien. Se lo suplico.-El doctor dirigió la mirada al primo del rubio y este asintió con una leve sonrisa en su rostro.

-Está bien muchacho, pero solamente por cinco minutos. El joven Min necesita mucho descanso ¿de acuerdo?-El menor asintió y siguió al doctor.

El pelinegro se acercó a su mayor, el cual estaba postrado en aquella cama, sin mover un solo músculo.-Yoonie.. si tan solo no hubiera sido tan idiota y te hubiera recordado rápido tal vez no estarías aquí..-Acarició su cabello.-Tantas estupideces que hiciste por mí, jamás las olvidaré..-Se quitó su collar y se lo colocó en la mano al rubio.-Te amo.-Besó su frente y sonrió, pero aquella sonrisa se borró cuando escuchó unos gritos y llantos muy fuertes provenientes de dos habitaciones después que la de Yoongi.

Era Taehyung.

-¡¡Jungkook, despierta!!-Un doctor lo sujetó, tratando de que se alejara del fallecido, pero el pelirrojo era más fuerte.-¡No me dejes solo!-Estremeció el cuerpo del mayor con fuerza.-¡Te lo suplico!-Gritaba, cacheteaba el rostro del mayor.-¡Despierta bastardo!-Volvió a estremecerlo.-¡Maldito egoísta!-Se aferró a su cuerpo sin vida.-Mi vida...-El doctor poco a poco lo separó del castaño, hasta por fin tenerlo bien agarrado.

Cuidaré de ti, siempre. || YoonMin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora