Este capitulo va dedicado a BananaPhoneCB 7u7.
Pov izumi:
Abrí mis ojos lentamente sintiendo como una luz los quemaba, intente levantar mi brazo para que este brillo no fusilara mis ojos pero no pude, me sentía pesado y adolorido, estaba tan cansado que mis parpados se cerraban solos. Tras unos minutos pude ver mejor y por desgracia no era la luz al final del túnel lo que me tenia ciego, era una luz barata que colgaba del techo, típica de hospitales antiguos, giré mi cabeza un poco, sintiendo como si esta se fuera a caer de mi cuello, a mi lado encontré a un mayordomo de la mansión, estaba atado a la camilla y parecía dormido, yo al igual que el estaba amarrado a esta y sentía un ardor indescriptible en mi pierna derecha, me picaba y dolía al tiempo, tenia calor y por mas que me moviera aquellas correas parecían inmutarse, empecé a buscar a mi alrededor algo que me ayudara pero era imposible, el dolor invadía mi cuerpo y tan solo sentía como las gotas de sudor bajaban lentamente por mi frente, empecé a cerrar lentamente mis ojos, dándome por vencido, resignándome a pasar el resto de mi miserable vida siendo un esclavo mas de Satou, sufriendo y esperando el día de mi muerte con ansias.
Cada día era igual, levantarme con una luz cegadora en mi cara, tomar las medicinas que me daba aquel enfermero mal encarado , comer a la fuerza y dormir, llevaba semanas sin caminar o ver la luz del día, sin decir palabra alguna, sin escuchar los murmullos del viento, en aquella habitación solo se escuchaban gritos de dolor que provenían de los trabajadores de la mansión, en las noches solo había llantos y rezos de piedad al señor, un olor pútrido se apoderaba de nuestros cuerpos delgados y débiles. No había ventanas pero sabíamos si era de día o de noche gracias a las rondas tan particulares de los enfermeros.
Las primeras semanas fueron un infierno, nadie sabia en qué lugar de aquella gran casa se encontraba, muchos gritaban e insultaban al patrón, tan solo se buscaban un castigo peor, te preguntarás qué es peor que aquello que vivíamos, bueno, a muchos los dejaban sin comer días, a otros les pegaban, sin embargo si no hacías caso a los enfermeros y solo formabas alborotos, si llegabas a rebelarte contra ellos, te buscarían para así satisfacer sus macabros deseos, había demasiadas personas en aquel lugar, pero siempre te terminan encontrando, muchas veces marcaban con una pequeña linea roja la camilla para así poder ir estos a la media noche a torturarte, su manera favorita era contando el dedo corazón con unas tijeras grandes y oxidadas, lenta y dolorosamente, mientras se burlan de tu desgracia, esto pasó dos o tres veces en mi habitación, yo solo cerraba los ojos, intentando ignorar los alaridos y las risas macabras de ellos, lo disfrutaban, sin embargo este no era el único castigo de la linea roja, llegaban a patearte y escupirte, inclusive puedo decir que hasta mataron a una persona a punta de patadas, sonaba horrible, podíamos escuchar perfectamente como sus órganos se desprendían, ante esto los enfermeros solo lo dejaron allí, muerto, como señal de advertencia. Cuando era la hora de los castigos la mayoría solo veíamos callados, con miedo.
A las semanas la mayoría se murió de hambre o simplemente las infecciones de sus heridas los mataban, muchos se volvieron locos y los enfermeros para no luchar con estos, siempre a las 12:00 pm los mataban, ahogándolos con las almohadas, los demás solo escuchábamos los gritos de sufrimiento, hasta que un silencio abrumador envolvía la noche, avisándonos de su muerte, a veces se escuchaban los sollozos de personas que perdían a sus amigos queridos, hermanos, después de todo, la mayoría llevaba años trabajando en aquel lugar . Todos los días alguien moría, y aunque no pudiéramos pararnos de las camas, lo sabíamos al escuchar el chirrido de las camillas con cuerpos fríos y putrefactos recorriendo los corredores, a veces hasta cinco cuerpos eran arrastrados por estas, y eso nos hacia preguntarnos cuantas personas más había en aquel lugar.
Un día, en medio de la noche, un fuerte ruido me despertó con el corazón latiendo a mil, todo estaba oscuro y solo podía escuchar muchas voces gritando, estaba tan asustado que me quedé helado en mi lugar, de un momento a otro sentí una manos frías y delgadas en mi pecho, estaban buscando algo, bajaron con rapidez hasta mis muñecas y empezaron a cortar las correas que me tenían preso...
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GOD! quién sera nuestr@ salvador/a? uwu que emoción e intriga...
espero que les guste el capitulo nuevo tanto como a mi, le metí ganas XD, hay muchas referencias a outlas ;-; jajaja es que me volví adicta a ver como juegan pq jugarlo ya es de mucha valentía :,v y no la tengo.
si les gusto díganme qué les pareció en los comentarios y no olviden darle a la estrellita de allí abajo.
los amo 737
PD: lamento las faltas ortográficas y de coherencia, las corregiré en algún momento de mi vida, lo prometo uwu.
palabras en total: 864
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🌻"Devuelta a nuestro hogar" - Yaoi♡🌻
Fanfiction2 temporada de "Caperucita roja versión yaoi" X : Deberías rendirte ya, no tienes escapatoria... Izumi: Jamás me rendiré, prefiero morir antes de caer en tus engaños de nuevo, me das asco! En aquel pueblo solitario donde solo vivían los más humildes...