Solo Tu

Completamente feliz

Mi corazón se paró cuando me detuvo frente al salón, él estaba de forma tan casual contra la puerta y cuando me habló sobre reunirnos el fin de semana a las nueve, casi grito de la felicidad.

Intente estar serio y no sonrojarme, pero no podía concentrarme en nada cuando él no paraba de mirarme durante toda la clase, pero me encanta tener su atención.

—Ned ¿Tengo algo en la cara?— pregunté inocente. Él me miró y negó, entonces volvimos a mirar al frente, pero no podía evitar mostrar una sonrisa cada vez que nuestros ojos se encontraban.

Cuando terminó la clase, estaba algo triste por saber que no lo podría ver durante un tiempo. Caminaba por los pasillos hasta que choque con Flash y este no parecía haber tenido un buen día, me miró como si fuera un objetivo, estaba tan feliz que no tenía ganas de fingir miedo o algo. Él intentó golpearme, y yo sostuve su puño en el aire.

—No tengo ganas de que me molestes, así que has un favor al mundo y ¡Piérdete!—le grite mientras lo empujaba contra una pared, luego seguí caminando, ignorando la mirada sorprendida de muchos, y más la mueca de dolor que provoque en Flash, pero él se lo busco, si fuera por mi, le hubiera roto el brazo. 

Estaba tan animado que nada podría destruir mi buena actitud, eso creía hasta que escuche a alguien toser. Era una tos bastante larga y algo dolorosa. Cuando gire a ver en el pasillo de la escalera y allí estaba Wade sosteniéndose de una pared.

—¿Estás bien?—pregunté rápido— Digo ¿Se encuentra bien profesor?— él se incorporó y me sonrió, algo que odie con todo mi ser, nunca pensé que algo tan insignificante me molestara tanto, como una sonrisa falsa suya.

—Estoy bien, creí haberte dicho que estaba recuperándome de un resfriado— me mintió y luego se puso serio— tú deberías estar más preocupado por mi materia— yo solo me avergoncé un poco con respecto a eso.

—Y-yo si me preocupo, e-es solo que a veces no entiendo— me excuse vagamente.

—¿Hiciste el trabajo?— preguntó acusadoramente mientras se apoyaba contra la pared.

—Yo lo haré, cuando llegue a mi casa— confesé y él me miró extrañado.

—Claro, pero hablo del que tenían que entregarme hoy— yo solo mire al piso avergonzado—¿Ves? Por esta razón es que me tendrás que ver todos los fines de semana a las nueve— comentó. «Si fuera por mi lo vería incluso hasta cuando duerme» Pienso sin querer.

—¿Cu-cuánto tiempo tendremos que vernos?—Pregunté intentando desviar mis pensamientos.

—La verdad, no lo pensé detalladamente—contestó— pero serán los que sean necesarios para que apruebes el recuperatorio—contesto algo más animado.

De pronto volvió a toser, me preocupe mucho y no dude en acortar la distancia entre nosotros, acaricie su espalda para reconfortarlo, cuando terminó yo le extendió un pañuelo que saqué de mi bolsillo.

—Lo siento, estoy bien— esas palabras fueron linda, pero me molestaron bastante—te lo devolveré algún día—comentó referido a mi pañuelo, yo solo pensé que me encantaría que se lo quedara con tal de que tenga algo mio. «Aunque puede devolverla cuando termine de usarla, será una buena pieza para mi colección» Ese pensamiento se instaló rápidamente en mi mente, y gracias a eso tuve que reprimir una sonrisa.

—N-no se moleste, ¿Quiere que lo acompañe a la enfermería?— pregunte algo asustado— creo que necesita unas pastillas— asustado era poco para el conjunto de emociones que sentía en ese momento, la idea de que él tenía cáncer y que estaba empeorando, era insoportable. Después de un pequeño momento metido en mis pensamientos, sentí una pequeña molestia en medio de mi frente, Wade me había golpeado con la punta de uno de sus dedos.

—Preocúpate por tus notas— me sonrió— aun pienso que tienes algo en contra de mi materia— él era un experto para cambiar de tema sin que me diera cuenta, pero es entendible debido al hecho de que no éramos muy cercanos, existía esa distancia profesor-alumno que no podía destruir. Él, después del golpe, me acarició el cabello y yo más por instinto que por otra cosa, coloque mi mano sobre la suya.

—Profesor— dije más serio de lo que intentaba aparentar, estaba algo molesto porque no me tomaba enserio, me trataba como si fuera un niño—me asegurare de aprobar su materia— nos quedamos unos segundo en silencio, no quería romper el contacto de nuestras manos.

—Claro, pero ¿Me puedes soltar?— preguntó con cierto tono de burla, perdí toda mi seriedad por mi fuerte sonrojo, y lo solté—Ahora entiendo todo, divagas mucho y pierdes la concentración— comentó divertido. «La verdadera razón es que usted me distrae con su perfecto ser» pensé casi al instante.

—Ya me tengo que ir— murmure mientras me alejaba y lo soltaba.

Agradecí internamente que era el final del día, porque la verdad un minuto más a solas con Wade, y no sabría cómo controlarme.