Deadpool

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El niño estaba empacando, después de la muerte de su tía, decidió que debíamos irnos, hacer nuestra vida juntos. Y cuando nos encaminamos a la estación de autobús, Bruce nos estaba esperando. Admito que casi tiré todo lo que traía cuando lo vi.

—¿Cómo? Creí que tu...—dije una vez nos sentamos ya en el bus.

—¿Estaría muerto?—preguntó—Al principio también lo pensé, pero cuando me ofrecí a ayudarlo para que recuperarás tu forma normal, me dejó vivir—explicó, y mis ojos fueron a ese niño a mi lado.

—Fue un favor por otro favor. Ya tome una beca en otra universidad, una vez me gradúe, trabajare con el señor Banner—explico y luego tomo mi manos, y entrelazo sus dedos—Soy tu acosador, no creas que no he planeado más cosas para nosotros—me aclaró.

Luego de eso, llegamos a un pequeño departamento, y aunque no tenía mucho espacio, el niño estaba feliz, y sabía contagiar eso.

<Mira como brilla su carita> Dijo Blanca.

<Ya me dan ganas de abrazarlo> Comentó Amarilla.

—Cierren la puta boca—gruñí y el niño se me acercó.

—¿Qué sucede?—preguntó.

—Creo que debo buscar trabajo, uno que no esté lleno de potenciales niños pervertidos—comente mientras le estiraba la nariz suavemente.

—Diría que me ofende, pero tienes razón—murmuró—¿Qué tal un bar o algo así? Hasta que yo me reciba y pueda mantenerte, aunque tiene que ser en un lugar poco concurrido, y con poca gente o con gente muerta. O algo por el estilo. No quiero ponerme celoso—comentó pensativo.

—Para eso, mejor soy asesino a sueldo—comente y sus ojitos brillaron.

—Mercenario suena mejor, aunque igual, podrías ganar mucho sivlo haces bien, no digo que lo hagas porque a mí no me gusta la idea de que estés matando gente, por otro lado...—comentó con cierta emoción.

—No niño. Así que tu debes ir a estudiar y yo voy a comer—dije y me levanté a buscar algo a la cocina.

—No importa que hagas, yo estaré orgulloso de ti. Y me encargare de que nadie nos moleste nunca, no importa si tengo que destruir a media ciudad—me aclaró.

—No, no más muertes, a menos no por tu mano ¿Está bien?—pregunté. Y él solo suspiró algo decepcionado.

Aunque tenía mi idea de trabajar en un bar, me sorprendí al ver que no conseguía muchos bacantes. Igual no me veía muy viejo, Peter y Bruce me dieron una sustancia para sanar mí cuerpo, no era totalmente efectiva, pero duraba una semana. Pero volviendo al punto, todo iba mal, hasta que pase por un callejón. Ese día estaba lloviendo, y el niño estaba durmiendo en nuestra cama, mientras yo buscaba trabajo. En fin, el callejón era oscuro, pero escuche los gritos de un sujeto, al principio pensé que era una mujer y me preocupe, sin miedo me adentre y mate a dos sujetos.

Esos sujetos estaban acorralando a un chico, que gritaba bastante agudo. Me acerque por detrás y a uno le rompí el cuello, al otro, le di una patada y con la pistola, lo amenace hasta que se fue.

—Eso fue increíble—dijo ese sujeto.

—No me importa—conteste y guarde el arma en el bolsillo de mi sudadera.

—Soy Jack Hammer, soy dueño de un bar—dijo con una sonrisa aliviada.

—Vaya, soy Wade Wilson—dije estirando mi mano, y lo ayude a levantarse.

—Oye, lo mataste—dijo nervioso, viendo el cadáver en el piso—¿Eres un mercenario?—preguntó de repente.

—Yo...—dudé en contestarle, pero luego simplemente suspire— Si lo soy ¿Y qué?—pregunté seriamente, alzando los hombros.

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