𝗔𝗣𝗢𝗖𝗔𝗟𝗜𝗣𝗦𝗜𝗦 | T᙭T

04

—Déjame ver si entendí, nos quedamos sin gasolina y no tienen idea de cómo cruzar al otro lado.

—Exacto—Yeonjun le dió la razón.

—Yo dije que volviéramos—comentó Soobin—Capaz entre los autos que dejamos atrás haya alguno que todavía funcione.

La chica analizó la situación. Al principio no entendía por qué no sabían cómo cruzar, era un puente, lo obvio era cruzar caminando pero luego se percató de muchas cosas. Los autos estaban atravesados en ambas vías del puente. Era un camino largo hasta el otro lado y el hecho de que estuviera en completo silencio no era muy atractivo.

—Viste lo mismo que yo ¿no?—preguntó Yeonjun en voz baja.

Se giró a mirarlo. Tenía una sonrisa ladeada en el rostro con un aire de suficiencia. La imagen del chico de la pradera ensangrentado volvió a su cabeza, parpadeó un par de veces y evitó su mirada fijándose en su mejor amigo que estaba recostado en el Jeep mientras Huening observaba el cielo.

El de Seúl se extrañó ante su gesto, pero no le dió importancia.

—Tiene que haber otra forma—negó con la cabeza—¿No hay otro lado por el que podamos cruzar?

Yeonjun negó con la cabeza y miró hacia el frente.

—Si queremos salir de Daegu este es el único camino—explicó—Los demás están en lugares muy expuestos.

—¿Cuántos metros son de aquí allá?

—Unos cien metros más o menos—contestó Soobin.

Se mordió el labio mientras pensaba. ¿Era seguro cruzar? El otro lado estaba algo lejos y habían unos cincuenta autos y dos autobuses que se veían algo peligrosos. Era más que seguro que habían infectados en la zona y a pesar de que este era el camino más "oculto" según el mayor, en la posición en la que estaban se encontraban expuestos. Volver a Daegu no era una opción, sobretodo si no tenían auto. Debían tomar una decisión rápido.

‹‹Me arrepentiré de esto››

La chica se caminó hacia el frente.

—¡Hey! ¿Qué estás haciendo?—preguntó el peliazul algo alterado.

Kai y Soobin también reaccionaron ante el movimiento de la joven acercándose rápidamente.

Los tres estaban alerta, el movimiento de la chica los había tomado por sorpresa pero se relajaron al ver lo que realmente intentaba.

Victoria tomó una vara de metal a unos pasos de ella. La movió cómo si fuera una espada por unos segundos y caminó de vuelta al grupo.

—Tenemos que cruzar.

Soobin y Kai la vieron con los ojos muy abiertos y tragaron con fuerza.

‹‹Tiene que estar bromeando›› pensó el pelinegro.

Yeonjun, quién permanecía serio asintió.

—Estoy de acuerdo.

Le dedicó una mirada a su hermano y este asintió. Confiaba ciegamente en el peliazul, si él creía que era una buena idea, entonces Kai también. El más alto por otro lado negó varias veces con la cabeza.

—No me parece seguro.

‹‹Nada es seguro ahora››

Soobin sabía que no habían lugares seguros ahora y que lo más cercano a seguridad que tendrían estaba cruzando ese puente. Todos parecían confiados, algo asustados, pero confiados al fin. Aún así, el chico de Ansan tenía un muy mal presentimiento.