Ser inerte PARTE 2 (Connor DBH) [EN PROCESO]

El taxi

LO PARÓ CON UNA MANO LO PARÓ QUE YO LA VI...

Lo siento, es que el nombre del capítulo me hace gracia. Si lo habéis pillado dejádmelo saber JAJAJAJA

~•~

Estuve casi todo el camino de vuelta en silencio. Connor interpretó que estaba así porque no quería hablar, el tartamudeo me fastidiaba mucho. Pero no era por eso.

Todo el tiempo de espera al taxi, y el trayecto en el taxi automatizado, lo pasé dándole vueltas a la cabeza. Pensaba en cómo decirle a Connor lo de la serie RK900. Por otra parte, pensaba en que antes deberíamos empezar a buscar pistas para reabrir el caso. Sin embargo, no podía evitar pensar en la boda de Kara y Luther, cada vez más próxima. Estaba al borde de un ataque de ansiedad.

— ¿Estás bien? —me preguntó Connor en el taxi, rompiendo el hielo. Debió haber notado mis niveles de ansiedad, que eran normalmente elevados.

—Sí, sí...

Y de repente, la mente se me fue a otro sitio. Un mísero día antes de entrar en shock y que empezasen mis síntomas de estrés postraumático, en la plaza, había descubierto algo que me había dado un vuelco al corazón.

Una larga temporada antes de ese día, Connor perdió la memoria por mi culpa. Le pedí a Kamski que se la borrara para así poder eliminar a Amanda, y lo conseguimos, pero lo que vino después fue un calvario.

Sin embargo, aquel día, justo cuando me encontraba desesperada, desperté en la plaza con una alegría. Tras separarnos cuando nos acusaron de terroristas, Connor, Hank y yo nos reencontramos. Pero lo que nos hizo llorar a los tres como unas magdalenas fue el increíble hecho de que Connor regresó a nosotros con sus recuerdos. Había recuperado la memoria. En el hospital me contó cómo sucedió, pero yo seguía sin dar crédito.

Era el día más feliz de mi vida, lo habíamos conseguido, estábamos juntos, y él me recordaba. Nos esperaba una vida feliz y plena, ¿y todo se fue a la mierda por mi psicosis? Qué injusto.

Entendí por qué mi mente empezó a recordar estas cosas. Aquel día pude comprobar que Connor había vuelto de verdad cuando observé cómo me miraba y me trataba. Sentía un gran cariño hacia mí, me miraba con una ternura inmensa, y cuando me vio atravesada por dos balas, me percaté de que él sintió los balazos tanto como yo. Era como si fuésemos la misma persona.

Se me empañaron los ojos cuando me imaginé por lo que tuvo que haber pasado mientras yo vivía aquella situación de paranoia. Durante la visita a Kamski le noté cierta melancolía. Desde luego, salió su lado sensible, aquel que vi en Comerica Park. Incluso en ese momento, en el que me encontraba pensando con los ojos hinchados y nublados me di cuenta de su mirada atenta y preocupada. ¿Era yo la culpable de que lo nuestro hubiese dejado de funcionar? Sin duda, la respuesta era sí, aunque si lo hablaba con Connor, él me diría que no fue culpa mía, ya que yo pasé por una etapa difícil, pero en el fondo los dos sabíamos la verdad.

— ¿De verdad que estás bien? —inquirió.

—Perfectamente —musité con un hilo de voz, con la garganta encogida.

—Entiendo que estés mal. No hace falta que lo ocultes. Supongo que ha sido algo traumático.

—No, no estaba pensando en eso. Aunque haya tartamudeado mucho, al final no he estado mal del todo. Ya sabes, algo de tensión, pero nada con lo que no pueda vivir —sonreí, intentando que dejara de preocuparse por mí.

— ¿Y en qué piensas?

—Ni te imaginas la de cosas que se me están pasando por la cabeza...