Kyoka sabía que estaba mal. Sabía que tarde o temprano la locura y la obsesión se volverían una carga, pero no podía dejar que ese ojeroso de mierda alejara a su Pikachu de su lado.
▪ Del amor y cariño a un acoso y obsesión.
▫ Los personajes no me p...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Aquella imagen dorada se hizo presente en mi cabeza otra vez. Su cabello rubio con un rayo dibujado. Sus ojos color ámbar. Su cuerpo bien proporcionando.
Sus labios que tenía ganas de saborear. Su hermosa sonrisa que iluminaba cada día de mi vida. Aquella imagen era una que nunca olvido. Una imagen que me encanta recordar cada vez que puedo o se me da la oportunidad.
Kaminari Denki era ¿Que digo? Es un ser de luz. Un ser que necesito cada momento a mi lado. Un ser que me ayuda en mis días malos y me hace sonreír en mis momentos de tristeza y soledad.
Mis sentimientos hacia el son románticos, amistosos, cariñosos, lujuriosos, de todo lo bueno que no sea odio. Aunque claro, lo malo de conocer a un ser de luz, es saber que otras personas podrían y pueden quitármelo. Alejarlo Y yo no quería eso.
Porque Denki es mio. O eso es lo que dicen mis sueños.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Me he levantado con solo una misión en mi mente. Ir hasta el y estar a su lado. No me importa como sea su comportamiento, quería estar con el, en las buenas y en las malas.
Estaba sentada en uno de los sofá de la sala. Miraba mi celular, donde mostraba fotos de Denki y yo, paseando o haciendo alguna tontería.
Sonreí inconscientemente por eso. ¿Como alguien se podía ver tan hermoso hasta cuando comía? No lo sabía bien.
—Hey Jiro ¿Que tal?
Levanté la vista, para encontrarme con la chica pelinaranja de la clase B. Itsuka Kendo.
—Ah hola Kendo... —Respondí, volviendo a clavar mi vista al celular.
—¿Que haces aquí tan temprano? Falta una hora para que las clases comiencen.
— Que yo quiera despertarme una hora antes no es asunto tuyo — No tengo ganas de poner excusas.
—Como quieras —Se encogió de hombros y se dio la vuelta para ir a la cocina.
