El inesperado final de la emperatriz

𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 16

 Ha-neul

Ni si quiera hemos puesto una tienda, y ellos quieran adentrarse aún más en el bosque.

Con solo algunos minutos, el emperador y Sir Kuan-yin han logrado hacer una masacre en todo el bosque

—Las marcas de las garras del Crodeer son el orgullo de este castillo. Un día tendré mi oportunidad de atrapar a uno. Fue lo que dijo el señor Dak-ho

¡Lo siento señor Dak-ho! No pude hacer nada para detener estos demonios...

Ambos continuaban asesinando monstruos sin parar. Esto realmente parecía un mar de sangre.

—Ha-neul. Quiero que la tienda sea montada aquí

—¿Aquí mismo? —Pregunto sorprendida

—Si. Es muy tarde para volver hoy. Sera más fácil pasar la noche llevando la sangre ya que las criaturas de bajo nivel no se acercarán.

Al parecer, el emperador esta tras el crodeer...

No es raro que la bestia huela la sangre y corra con entusiasmo.

Quizás pueda estar equivocada, pero ellos parecen estar tramando algo más.

—Dragon...—Dice entre susurros Kuan-yin

Debo haberlo escuchado mal...

El no pudo haber dicho dragón, eso es demasiado...

El cielo comienza a oscurecerse, pareciendo como si una lluvia no tardará en llegar.

Aun asustada por las palabras de Sir Kuan-yin, intento enfocarme en tender la tienda.

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Lixue

—¿Estará realmente bien para ellos estar ahí fuera? —Pregunta la mujer preocupada

—Espero que no se excedan—Responde nerviosa

No puedo ver la bandera de su majestad

Cuanto más lejos vaya, más criaturas peligrosas puedes encontrar. ¿Acaso fueron tan lejos para probar su propia fuerza?

Me pregunto... porque tengo un mal presentimiento sobre esto

—¡Ah! —Un estrepitoso grito se escucha a mis espaldas tras haber sido salpicada con una copa de vino

—Oh, que torpe de mi parte—Dice Mi-suck fingiendo una lastima de lo menos creible

Esto definitivamente fue a propósito.

—No pasa nada—Refriego la manga de vestido para limpiar mi cara —No sabía que tu vista era tan mala

—¿Qué? ¡No sé qué está diciendo! —Grita avergonzada

—No te preocupes. No quiero preocuparme acerca de los defectos de las otras mujeres—Me mira enfurecida pero solo se queda callada

Irritada por la situación, salgo del salón para dirigirme a mi habitación y cambiar mi ropa ahora manchada.

Dios, ¿Por qué todas se comportan de forma tan infantil?

La sirvienta me ayuda a terminar de arreglarme nuevamente hasta que el sonido de una trompeta nos interrumpe.

—¿Qué es ese sonido?

—Ellos deben estar de vuelta—Contesta mientras termina de vestirme—Los primeros caballeros deben estar regresando

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—Wow, esto es bueno—Dice Dak-ho mientras mira expectante —Ese es un alce de Apathy. No es fácil de capturar uno tan bueno