𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 32

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La seguridad por alguna razón que desconozco se había vuelto más estricta estos últimos días. Por lo que mi idea de escapar estaba totalmente fuera de juego.

Los juegos con Huan yue continuaban y con ello una serie de pérdidas para él. Estaba mas que claro que perdía cada jugada a propósito.

¡Pero hoy estoy dispuesta a cambiar el tablero a mi favor!

—Su alteza ¿Quisiera jugar un juego conmigo? Propongo con mi cara sombría

—¿Un juego? —Pregunta con curiosidad

—Si. Cualquier juego que su majestad quiera jugar

Después de ver como parece pensar muy bien mi propuesta. Sale una terrorífica sonrisa de él.

—Lady Lixue, seguro sabes cómo mover mi corazón. Muy inteligente de tu parte—Evito mirar su diabólica sonrisa —De acuerdo. Si puedes ganar. Te mandare a casa

—Acepto—Contesto de forma inmediata

No puedo quedarme aquí por más tiempo. La sociedad, la jerarquía, todo aquí es asqueroso. Solo quiero volver a casa lo más rápido posible.

Y en estos momentos estoy mas que segura de poder ganar cualquier cosa que me propongan.

—Por ahora solo te pediré que vayas vestida con el vestuario que te mandare a traer para esta noche—Solo me dedico a asentir ante su petición

Durante el día me distraigo con la presencia del sir quien continúa haciéndose pasar por una sirvienta y que por asares de la vida nadie sospecha que en verdad es un hombre.

La noche cae y con ella la llegada de una vestimenta sumamente fuera de lo común. Las sirvientas habían traído consigo una peluca, un antifaz y una oscura capa que me llegaba hasta los tobillos.

Me parecía de lo mas ridículo ir vestida de este modo, pero mis ganas de marcharme de aquí son mucho mas fuertes que la vergüenza.

En mi mano traía el antifaz. Pues me lo pondría al llegar al salón.

Con incomodidad camino por los pasillos de la mansión. Tener una peluca era verdaderamente incómodo.

—De una criada que intentaba escapar de una mansión ¿Ha sido invitada a un salón secreto? —La voz conocida a mis espaldas me hace mirar hacia atrás

Ah, de verdad que giro de eventos se ha dado...

—Creo que te estas confundiendo con alguien mas —Vuelvo a dar inicio a mi caminar hasta que nuevamente soy detenida por el agarre de su mano en mi muñeca

—Es inútil

—¿Qué es esto? Estas siendo grosero—Lo miro de forma despectiva

—No puedo dejar que una persona sospechosa recorra la mansión. Por favor se honesta. Por el bien de mi amiga de bebidas pretenderé que no te he visto. Incluso si eres una ladrona—Esta vez lo fulmino con la mirada

—¿No puedes simplemente dejarme ir por el bien de tu amiga de bebidas?

—Lo siento, pero si te dejo marchar ahora creo que tendré un mal presentimiento —Suelto un largo suspiro ante su insistencia

Bueno, no es como si fuera un gran problema decirle mi nombre.

Su agarre ejerció de pronto mucha más fuerza que antes.

—Disculpa, pero eso duele—Protesto por su brusquedad

Al fijarme mas en el me percato de como mira fijamente a la mujer que había llegado tras nosotros.

El inesperado final de la emperatrizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora