Capítulo 5

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- ¿Estas bien? – Thomas me saca de mis pensamientos, así que no tengo de otra más que mirarlo, sonreír y asentir rápidamente – Recuerda que hoy tenemos una cena.

Maldita sea lo había olvidado, llevamos saliendo ya casi tres semanas y me parece que quiere celebrar y se me olvido ¡aplausos Lydia!, me doy una patada en el trasero mentalmente, y como siempre disimulo.

- Claro, de hecho, saldré temprano para arreglarme... ¿A dónde iremos? – trato de pensar algo para ponerme, ya que obviamente no prepare nada.

- Bueno de hecho es curioso, ya que será un picnic en tu patio – sonríe

- ¿En mi patio? – casi me ahogo con mi propia saliva, ¡hoy precisamente hoy!, ¡soy increíble!

- Si, bueno creí que no te gustaría salir tan de noche y dejar a Emma sola...- asiento, con suerte y si termino rápido de hablar con Nick y Derek se podrán ir temprano – además hoy abra auroras boreales, me pareció perfecto para la ocasión verlas desde tu enorme jardín.

Soy un maldito monstro el planeando todo eso y yo estúpidamente pensando en nada y olvidándolo. Al final sonrió me acerco a él y le planto un beso.

- Te parece... ¿a las nueve? – le pregunto, con suerte y se abran ido y estaré en paz con Thomas.

- Perfecto – sonríe – entonces puedes tomar el resto del día.

Son las doce del día, le dije a Nick a las tres... pero pensándolo bien es mejor más temprano, así tendré tiempo para arreglarme.

- Si, entonces te veo a las nueve en la casa – Le doy un beso de despedida, el me despide mientras me subo a mi camioneta... arranco y pongo el altavoz.

- ¿Lydia? – oír su voz me produce un escalofrió y dolor de estómago... pero de igual manera lo ignoro.

- Si, los veo en mi casa en una hora, ni más ni menos... si no llegan no abra otra oportunidad – le cuelgo.

Esta será la ultima vez que los vea, de eso estoy segura... no puedo permitirme estar siempre pensando en Nick o en Derek, se que cometí errores, intente remediarlos, pero al final todo salió mal para todos, y ahora que tengo la oportunidad de empezar desde cero con Thomas y Emma, no quiero que absolutamente nada lo eche a perder... se que no amo a Thomas, pero es una muy buena persona y que en todos estos meses desde que he trabajado para el nunca me ha faltado, y a Emma tampoco, así que si con él puedo rehacer todo... lo intentare... lo dejare todo en el pasado.

Cuando llego a casa, para mi suerte Camila me dice que tenia una cita con el chico de su escuela, así que me evito la pena de prácticamente correrla, le deseo lo mejor y enseguida me dirijo a la ducha con Emma y las dos tomamos un baño rápido, es algo a los que nos acostumbramos y es lo mejor de la vida, a diferencia de que hoy no nos podemos tardar como acostumbramos, aunque no quiera aceptarlo ellos son padres de Emma, aunque uno de ellos no lo sepa, se que no tardaran en llegar.

- Muy bien mi princesa hermosa, tienes que estar presentable... ya que tal vez hoy le diga a tu padre... que es eso... tu papá, para acabar con tantas mentiras – ella sonríe y habla conmigo con esos "agu, prrr, y sonrisitas"

Mientras la arreglo con uno de sus vestiditos de flores rosas y moradas con amarillo, me noto ansiosa y nerviosa, tanto por la cita con Thomas, como con mis invitados, como puedo me pongo unos jeans que realzan mis curvas, zapatos Oxford con un poco de tacón, una blusa roja con hombros descubiertos y que encaja perfecto a mi cintura y mostrando un poco el pecho que me creció, un poco de sombra café, delineado y rímel. Rubor, aunque no creo necesitarlo y un brillo.

Contrato de: Un amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora