Derek Hale has a Boyfriend [Sterek]©M-ᴘʀᴇɢ

Capítulo 12

Stiles

Cuando desperté aquella mañana esa sensación de que algo malo pasaría aún seguía persistente en mi interior. No quería pensar en ello pero cada vez me sentía más ansioso y nervioso. Era algo que simplemente no podía evitar sentir. Me senté en la cama y pasé una mano por mi cabello, revolviendolo aún más y estiré mis brazos entumecidos.

A mi lado derek aún seguía dormido, estaba boca abajo, su cabello tapaba casi todo su rostro. Era tan sexy.

Anoche nos habíamos dormido a las tres de la madrugada, teniendo sexo y hablando. Bueno la conversación se extendió más de lo esperado y cuando nos dimos cuenta ya habían pasado más de la una.

Cuando me levanté de la cama sentí todo mi cuerpo adolorido como si me hubiese atropellado un camión, y ni hablar de mi trasero, lo primero que haría al lavarme los dientes sería tomar un analgésico para el dolor. Mataría a derek después.

Caminé hacia al baño e hice mis necesidades, me lavé los dientes y luego entre a la ducha, primero lavé mi cabello con mi shampoo con olor a melocotón y a vainilla, después tomé el jabón de avena y lo talle por todo mi cuerpo. Hasta quedar completamente limpio. Salí del baño con una toalla rodeando mi cintura y me dirigí al closet por mi ropa. Tomé un bóxer azul del cajón de la cómoda y me lo coloqué. Fijandome en la ropa interior de derek que estaba ligada con la mía, la gran tonalidad de negro resaltaba entre los colores de mi ropa.

Increíble.

Tomé unos jeans negro rasgados y me los coloqué, después tomé una remera negra sin mangas y una camisa a cuadros rojos y negro.

Cuando termine busqué con la mirada mis amados converse negros por la habitación, miré por debajo de la cama y no estaban, suspiré. Dirigiéndome a la pila de ropa que derek dejó tirada en la esquina del cuarto. Quité toda la ropa negra del moreno que estaba sucia y ¡bingo!. Ahí estaban mis converses.

Mientras me los ponía giré a ver al moreno que se había volteado y ahora abrazaba mi almohada, con la cabeza hundida en ella. La escena me dió bastante ternura. Derek me había explicado que mi olor lo volvía loco, que era una necesidad olerme a cada momento, al principio no lo comprendía totalmente pero después del que el lazo se fortaleció con la mordida, ví las cosas desde una perspectiva diferente y empecé a entender a lo que se refería. Por esa razón me había prohibido usar colonia o cualquier tipo de perfume que opacara mi olor natural.

Lo que haces por amor. El

Bajé a la cocina, tomé una pastilla del segundo cajón de la mesada y tomé un vaso de agua para ayudarla a bajar por mi garganta. Luego me preparé una taza de café humeante como hago usualmente cada mañana aunque ya no era tan temprano como creía, eran las 11:00am, según leí en el reloj que estaba colgado encima de la puerta de la cocina, jamás había dormido tanto, al menos agradecía que kendall no fue a despertarme. Dándole el primer sorbo a la taza ví a erica entrar hecha una furia y sentarse en una banqueta de la barra.