Capítulo 14

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- Aferon... - Lo miraba con los ojos completamente abiertos, mientras que el mismo la miraba completamente perplejo – Estas muerto... Espera - Se estremeció y comenzó a abrazarse -. ¡¿Estoy muerta?!

- No... - Dejo escapar un gran suspiro mientras la tomaba en brazos y esta daba un respingo -. No estas muerta pequeña.

- Pero... estas aquí. ¿Aquí? – Lo miro completamente confundida -. ¿Qué haces aquí?

- Sera mejor que entremos y... bueno hablemos – Miro la cabaña la cual ya estaba más cerca -. Todos.

__ no pudo entender a lo que se refería Aferon, en realidad no entendía que hacia Aferon en ese lugar, se supone estaba muerto. Ella vio su cuerpo, lo vio ahí en ese cofre después de la ceremonia... si Aferon estaba con ella en ese momento ¿Quién era la persona que estaba en el cofre? No pudo continuar con sus preguntas internas ya que estaban entrando a la cabaña, y por si fuera poco con las travesuras que la vida ofrecía, una voz femenina y muy familiar se hizo presente.

- Aferon, ¿Qué ocurrió? – Dijo acercándose y quedándose completamente pasmada al ver a la chica en brazos del mismo.

- __ - Dijo ella tapándose la boca.

- Rita – Dijo Aferon en un suspiro y luego volviéndose a ___ -. ___ nosotros...

- ¿Qué hace mi madre aquí? – Corto rápidamente __.


G había terminado la batalla, se encontraba completamente estresado, lo que menos deseaba era perder a __, recientemente le había confesado medianamente sus sentimientos, y estaba listo para buscar una opción para ellos, sabía que sería descabellado, no podía dejar la corona, no podía hacerle eso a Papayrus y al reino... Era una opción descabellada para la época en la que estaban, aunque aún había reinos con esas costumbres, podía convertirla en su única concubina y tenerla a su lado para siempre... No podrá darle títulos y lo que tiene una reina, pero estaría a su lado. Pensaba que era algo egoísta, pero eso los mantendría juntos. Bueno, si sobrevivió primero, vio la altitud de la caída, y eso hizo que se estresara a sobre manera, no tenía tanta magia como para brincar y caer con algún truco mágico, debía bajar lo más rápido posible, así que busco los caminos que lo ayudarían a bajar rápidamente.

Esperaba que ella estuviera bien.


__ se encontraba sentada en un pequeño sofá mientras veía a las figuras paternas que tuvo, sentarse frente a ella, en su interior crecía la cólera y más que gritar y maldecir, tenía que saber que ocurría.

- Tienes que saber la verdad – Dijo Rita.

- Claro, como descubrí todo el teatro, es necesario que sepa la verdad – Los miro completamente molesta-. ¿Planeaban decirme? – Miro a su madre -. ¿Nunca me ibas a decir? ¿Después de todo lo que he hecho por ti?

__ iba a continuar con sus reproches pero un enorme dolor se presentó en su costado, haciendo que la misma se retorciera, y demostrara muecas de dolor. Aferon y Rita vieron a la joven sumamente dolorida, debían primero atender las heridas de su pequeña, y posterior a enfriar un poco las cosas, contarle toda la verdad, con __ no debían existir los secretos. __ por su parte no pudo quejarse ante la ayuda que le proporcionaban, era cierto, estaba herida y necesitaba ayuda, podría primero atenderse y después escuchar todo lo que debían decir estas personas.


Los minutos estaban pasando y eso estaba desesperando a G a sobremanera, solo podía pensar en su bailarina y en lo herida que pudiese estar, no pudo contener más su desesperación, soltó un gruñido mientras corría a toda prisa, debía apresurarse, si los Living Bone se encontraban en tierra alta, podrían estar en baja, y para el tiempo que él se tomaba, pudieron atacarla. Ya faltaban pocos metros a encontrarla, se estaba acercando a la zona de caída, pero logro vislumbrar una cabaña, la cual comenzaba a salir fuego de la chimenea. Soltó un suspiro de alivio, debieron de haber ayudado a __.

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