Part 1

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Hoy como todos los días me levante, aunque no deseaba hacerlo. Que irónico a los 6 años daba gracias por un día más de vida y hoy a los 14,  maldigo cada vez que abro mis ojos. ¿Qué me paso?  ¿Por qué todo cambio? ¿En qué me equivoque? Ahora todo eso no me importa…Empezaré.

Cuando era niña, en mi escuela, sufría de bullying. Jamás dije que me molestaban, incluso que me ponían apodos o que me pegaban.  Según yo algún día se cansarían y me dejarían en paz, yo no les hacía daño. ¿Por qué ellos a mi si? Tenía miedo. ¿Miedo? Si, miedo. Miedo a que nadie me creyera o que incluso me tomaran por loca, no podía confiar en nadie. Mi propia mama me trababa mal y ella también me ponía apodos y me decía cosas feas. Mientras en mi escuela me decían “gorda” en mi casa mi mama me decía “cerda”, mientras en mi escuela  me decían “inútil” en mi casa mi mama me decía “estúpida”, mientras en mi escuela me decían “nadie te quiere por fea y gorda” en mi casa mi mama me demostraba que era cierto. No sabía qué hacer. No pretendo decir que mi mama era un monstro, a veces lo era, pero había veces que ella también se portaba “Bien” o lo que se le puede llamar bien.  A los cuatro años mis padres se separaron, no le tomé mucha importancia, pero ahora sé que tal vez fue por mi culpa, quizá debí ser una mejor hija o yo no sé. 

Fui creciendo y conmigo fue creciendo todo. Los insultos, las molestias, los gritos, los golpes. Hasta que al fin alguien se fijó en mí, no sé cómo ocurrió eso, pero de que paso, pasó.  Se llamaba Cristian, yo apenas tenía 9 años. Era mi primera ilusión. Hasta que se cambió de casa y todo acabó. No le tome mucha importancia debido a que era niña. Seguí creciendo. Y seguí teniendo más problemas, y todo lo que conlleva eso. A los 13 años, tuve una nueva ilusión, (ahora que entendía todo eso) y bueno todo acabo muy mal, fui un mostro en aquella relación, fui la peor del mundo. Él se enamoró de mí y yo bueno lo lastime de la forma más grotesca. Tuve más novios, no me los merecía, pero bueno, así siguieron pasando los días nada cambiaba ni en mi casa, ni en mi escuela. Hasta que al fin todo acabó. Mi infierno terminó, acabé la escuela. Fue lo más genial del mundo, me cambiaria de colegio y bueno, con ello todo acabaría. Pero una vez más me equivoque.

La vida de Una suicida. †Donde viven las historias. Descúbrelo ahora