La vida de Una suicida. †

Part 7

Me abrasaron y me dijeron. Hola. No comprendía que pasaba. Pero fue hermoso. Jamás nadie había hecho algo así por mí. Jamás nunca había abrasado a tantas personas juntas.

Para mí eso fue especial. Todas ahora ya eran mis AMIGAS. Jamás pensé que dirías esto pero si eran mis AMIGAS, MIAS de mi propiedad. Fue HERMOSO.

Figúrame a mí en dentro de un abraso grupal.

*wwwwwwwwwwwwwwwwwww* Esa fue mi cara en aquel instante.

Después de que acabo. Pregunte y ¿eso? Y todas me contestaron te lo mereces, te has ganado nuestro cariño y ahora las cosas van a cambiar. ¿A qué se referían con que “va a cambiar”?

-No quiero que cambie, amo con son conmigo. ¿En qué forma cambiará?

-Ya verás. Dijo Gaby.

-¿Para bien o para mal?

-Tranquila, todo estará bien.

No comprendí su “todo estará bien” pero sabía que nadie iba a estar bien. Nunca hubo nada peor que la decepción de mi vida. Confié, fue lo único que hice. A la salida, me arregle. Salí corriendo. Lo vi ahí estaba parado con su hermoso y brillante cabello.

-Hola mi amor. Dije mientras lo bese.

-Hola mi pequeña. Respondió algo frio.

No entendía nada, a la mañana él fue el novio más cariñoso y ahora él se estaba portando como una completa basura. Sentí un vacío, que solo sentía cuando hacía tiempo que no veía a mi papa.

No entiendo. ¿Qué me está pasando? ¿Qué estoy sintiendo?

Sinceramente creo que me estaba enamorando, es que como no enamorarse él era “diferente”. Ahora es tiempo de confesar en qué sentido fue “DIFERENTE” para mí y porque se ganó mi amor.

Siempre que tenía novio. Me trataban bien, como a una princesa. Flores, cartas, chocolates, detallitos, carteles, cursilerías, llamadas. Y todo eso. Pero a mí eso siempre me pareció normal. Sin mirar que ellos se esforzaban mucho por hacerme sentir bien. ¿Y él? Bueno pues él era todo lo opuesto. Era un patán, a él no le importaba si estaba bien o si me sentía mal. A el jamás le importo aquello. Pero ahí fui yo de estúpida a enamorarme de él.

-¿Cómo te fue en el colegio? Pregunté.

-Ah, pues bien. Creo.

(No tuvo ni el más mínimo sentido de preguntar y a ti o algo así. Pero, aún así lo miraba y decía talvez solo tuvo un mal día. Se le pasará.)

No conversamos mucho aquella noche. Solo me dejo en el bus y subí a mi casa. Llegue, prendí la Pc. Abrí la red social. Abrí el muro de Luis y vi algo que me dejo muerta.  No tenía ni idea de quien era. Recuerdo claramente su nombre. Se llamaba Katty. Le había publicado:

“Hola mi amor. Tú eres mío y de tu mama ¿oíste? TE AMO”

Él no comento, ni tampoco le dio MG. Pero ¿cómo creen que me sentí aquel momento?

No hice absolutamente nada. Solo apague la Pc. Eran las 9 de la noche. La apague temprano. No dije nada a nadie. Fui a mi cuarto, me vi en el espejo y dije:

-A pesar de todo lo que has pasado, sigues siendo la misma idiota de siempre. Como diablos piensas que alguien podría enamorarse de ti. ¿No comprendes? Eres un fracaso, solo mírate. Das asco. Y él merece algo mejor que tú.

“Somos nuestro propio demonio, y hacemos de este mundo nuestro propio infierno.”

ME acosté, y trate de dormir y todos los recuerdos venían hacia mí. Era como si estar viendo una novela, cuando los protagonistas recuerdan algo. Recuerdo como sonaban esas palabras en mi cabeza. “Eres un fracaso, solo mírate. Das asco. Y él merece algo mejor que tú. “   Era verdad. Las lágrimas caigan por mis mejillas, hasta llegar a mi almohada donde penetraban y la mojaban. Llore tanto hasta que me quede dormida.

A la mañana siguiente me vestí. Salí donde mis abuelitos. Comí. Baje al colegio cuando iba por las puerta lo vi. Pero no estaba solo. Estaba con…..