La vida de Una suicida. †

Part 33

Llegue al baño, me encerré. Saque a mi mejor amiga, la tenía en mi bolsillo. Brillante, pequeña. Empecé a cortarme, un corte; luego dos. Al final muchos. Al poco tiempo, el dolor emocional fue sustituido por el de mi brazo. Y secretamente estaba muriendo por dentro. Era como si veía mi propia muerte sin ni una gota de culpa. Aunque fuera la única culpable.  

(¿Por qué no puedo ser tan linda, como ella? Repetía una y otra vez en mi mente, me sentía una basura.)

“El problema fue que le regale lo cursi, a alguien que merecía mi lado más frio.”

No dejaba de llorar, la sangre caía. Y recordé todas esas promesas de volver a cortarme entonces repetí una y otra vez:

“A todas las personas que les prometí no volver a cortarme, perdón, perdón, perdón.”

Lagrimas caían, y sentía como si mi corazón se rompía un poco. No volví en esa hora, tenía tantas ganas de quedarme ahí. SOLA. Quería pensar bien las cosas. Nadie me encontraría ahí.

# Terapia.

-¿Cómo hago para seguir sin él?

-Simple, olvida el pasado.

-¿Olvidar el pasado? ¿Tú crees que es fácil, teniendo estas cicatrices? Levante mi manga.

-Pero el tiempo…

-No, el tiempo quizá pueda sanar las heridas, pero las cicatrices siempre me recordaran el pasado. Siempre me recordaran a él.

*S-I-L-E-N-C-I-O*

Me fui a mi casa, prendí la pc. Decidí escribirle. Pero jamás me contesto, mírenme, aquí estoy otra vez... Suplicando una respuesta de vida... Solo tratando de esperar a que el me conteste; para saber si todo estará bien o si se desmoronara de nuevo… Que patética soy. Fui al colegio y ahí estaba él, no me tomo en cuenta. Por una semana, fue la semana más larga del mundo.

“El infierno está vacío, todos los demonios están dentro de mí.”

Pero fue la más deprimente, pase llorando. Atracándome de chocolate, pase acostada sin salir. Reprimiéndome cada día, cada noche. Por ser miserable. Estoy harta de mi vida, todo se desmorona.

Hasta que fue un viernes, a la salida de clase. Hablamos, muy seriamente. Casi llorando. Le dije:

-¿Entonces que hago, para que me quieras?

-Solo se tu misma. Te amo, ¿es tan difícil de entender?

-Quizá, bueno no sé cómo te parezca pero si no lo digo ahora; me voy a ahogar…

-Claro, dilo.

-Lo que tengo que decirte es que…