Mi pequeño Monstruo

Capitulo 10:Un beso vale más que mil palabras

Ese mismo día, en la salida…

-Lo siento Sasuke-kun-dijo cabizbaja Hinata a Sasuke. La clase había empezado a recoger y sus compañeros fueron saliendo-pero como sabes, hoy me han castigado y…-

Sayako, Shino y Kiba miraban a los dos des de sus mesas. Naruto estaba apoyado contra la puerta, con los brazos cruzados y el ceño fruncido, esperando a que la monstruito se decidiera a venir. Porque él solo no iba a cumplir el castigo, a no. La acompañaría por si intentaba escapar.

Bufó de nuevo. Porque tardaban tanto! Como si no se fueran a ver mañana…

-Quieres darte prisa! No quiero que me castiguen más días por esperarte-

Hinata le miró de la mala manera.

-Nadie te ha dicho que me esperes.-

-Y ver como intentas huir mientras yo ordeno? Ni creas que estoy tan loco-

Hinata apretó su puño. Tener que aguantar un castigo con él. Eso era lo peor que le había pasado en su vida.

-Entonces nos vemos mañana-respondió Sasuke, colgándose la mochila al hombro. Hinata le sonrió.

-Sí. Gracias!-y él a modo de despedida, alzó la mano y salió de clase, no sin antes detenerse al lado de Naruto.

-Recuerda que vais a cumplir un castigo, Naruto, no lo transformes en algo peor-le susurró y volvió a andar. Naruto sonrojado al completo, le gritó.

-Eso ya lo sé idiota! No voy a hacer nada!-

Shino, Sayako y Kiba apartaron la mirada del rubio y la dirigieron a Hinata. Los tres estaban muy preocupados por ella. El labio de Sayako tembló. Hinata cuando terminó de guardar sus cosas los miró.

-Tranquilos, voy a estar bien.-les sonrió. Sayako se le tiró encima, juntando mejilla con mejilla.

-No me fío de ese pervertido-sollozó-quieres que te esperemos?-

-Os lo agradezco pero no. Supongo que tardaremos bastante así que…-

-Venga-dijo Naruto que en un momento se había aparecido tras y le había agarrado de la mano. Tiró de ella.

-O-oye…suélta…-pero antes de que pudiera terminar Sayako le asestó tal patada que lo tiró al suelo.

-Saya-chan!-

Naruto se intentó levantar del suelo, pero Sayako, poniendo una rodilla sobre su pecho se lo impidió. Le agarró por el cuello de la camisa y lo medio incorporó.

-Como yo me enteré de que las has tocado o te has propasado con ella, juro por lo que más quieras que jamás volverás a ver la luz del día.-Naruto tragó saliva, asustado. Esa chica daba demasiado miedo.-me has entendido?-

Y él asintió. Sayako le alzó del suelo con solo una mano. Le puso la ropa bien y sonrió.

-Entonces, nos vemos mañana, Naruto, Hinata-chan.-

-Si-respondió ella sonriendo-hasta mañana!-

Y Sayako y Shino salieron sonriendo, mientras que Kiba le echó una mala mirada antes de salir.

Te estaré vigilando. Pensó. Naruto pareció entenderlo porque frunció el ceño.

Largaos de una vez

-A qué esperas!-le gritó Hinata des de la puerta. Y empezó a caminar. Naruto bufó de nuevo. Le esperaba una de las peores tardes de su vida. Agarró su mochila y la siguió.

Cuando llegaron al gimnasio, una gota resbaló de sus nucas al ver todo lo que tenían que limpiar y guardar.

-Y espero que con esto-señaló Kakashi los materiales-no se os ocurra volver a hacer manitas en clase-