Capítulo 9

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UN PASO POR DELANTE.

Gilbert

¿Alguna vez has sentido que lo tuviste todo, pero de pronto se esfumó?

¿Alguna vez te has sentido tan inconmensurablemente feliz que crees que nada puede apagar esa felicidad?

¿Alguna vez despertaste pensando que todo iría como el día anterior pero luego te das cuenta de que no será así?

Ella se había ido.

No, lo dije mal.

La habían secuestrado.

Jamás se iría por su cuenta.

Un mes había pasado desde que escuché la voz de Anne.

Un mes en el que intentábamos encontrarla, pero no sabíamos donde estaba.

—¿No la has podido rastrear? —pregunta Axel.

—No. Es como... es como si el vinculo se hubiera roto. No la siento. No siento su energía ni sus emociones. No siento nada —mascullé desesperado.

Y era así, ya no sabía que intentar.

Axel iba a responder cuando escuchamos el grito de una persona. Una de la cual no sabíamos hace mucho.

Salimos corriendo de la gran biblioteca y lo primero que vi cuando pudimos pasar por en medio de las personas que se arremolinaban a su alrededor fue su corto cabello rojo.

Sus ojos azules nos observaron y una sonrisa se formó en sus labios.

—¡Walter! —exclamó Axel ansioso y se abrazaron.

Había pasado tiempo y todos vimos lo mucho que se habían extrañado.

Finalmente juntos, Elemental y Cuidador.

—Los encontré, Xel, los encontré. No eran solo un mito. Realmente hubieron sobrevivientes —dijo Walter con aire soñador.

Exactamente igual a su hija Anne.

—¿Los encontraste? ¿Dónde están? —preguntó el albino con preocupación.

Walter se percató de mi presencia.— ¿Eres tú Gilbert? Estás mucho mas alto que hace un año.

—Y tú estás mucho mas viejo —murmuré yo para luego reír.

Él se unió a mis carcajadas pero luego puso un rostro serio, obviamente fingido.

—No le faltes el respeto a tu suegrito, Gilbert —dijo con los ojos entrecerrados.

—Como diga, capitán —respondí.

Walter nos llevó a una cabaña muy grande, de donde Marilla estaba saliendo.

—Necesitas decirles que están en confianza, que pueden dejar sus armas. No les haremos daño pero no me quieren escuchar —resopló ella con enfado.

—Con esa cara de amargada que llevas ni yo dejaría mis armas, Marilla —bromeó Matthew también saliendo de la cabaña—. Hay una jovencita que pregunta por ti, Walter.

—Si, debe de ser Ka'Kwet —dijo y los tres entramos a la habitación.

Estaba grandemente sorprendido.

Eran casi cincuenta personas que nos miraban con curiosidad. Todos iban vestidos de negro. Algunos llevaban arcos y carcaj en sus manos mientras que otros tenían cuchillos y un par de dagas.

—Les presento a la tribu sobreviviente. Son los hijos de los que pelearon contra las centrales. Aprendieron a vivir en los bosques, los desiertos y las zonas mas frías, donde ningún ser con dones pudiera encontrarlos. Ella —señaló a una chica que nos miraba con emoción—. Es Ka'Kwet y es la líder de todos ellos.

ᴇʟᴇᴍᴇɴᴛᴀʟ [1] (ᴀɴɴᴇ x ɢɪʟʙᴇʀᴛ)  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora