Dulcinea [Catradora]

Capítulo XVII

—Se tomaron su tiempo —Dijo Mermista sentada, Adora salió emocionada.

—¡Les presento a Catra! —Exclamó presumiendo a la avergonzada chica.

Ella traía la ropa que normalmente usaba, ya no usaba las cosas de Adora, Catra empujó levemente a Adora.

—¿Qué haces?

—Te presumo —Bromeó, Catra pisó su pie— ¡Auch! ¿Qué hice yo para merecer este desprecio?

—Me dejas en vergüenza —Dijo caminando hacia la mesa.

Adora solo rió torpemente siguiéndole, Catra detuvo su paso mirando a dos personas de la mesa.

—¡Hola Catra! —Chilló Entrapta para luego seguir comiendo.

—Catra, es un gusto conocerte, seré tu psicóloga a partir de hoy —Se paró de su lugar y se acercó a Catra estirando su mano.

—¿En serio? —Miró su mano incrédula.

—Lo siento, mi culpa —Retiró su mano.

Hubo un silencio incómodo mientras Glimmer aclaraba su garganta.

—Catra~ aquí hay comida que está enfriandose —Dijo tensa— ¿Por qué no te sientas a comer?

—No confío en ti, no me hables como si me conocieras de toda la vida —Susurró antes de obedecer a Glimmer.

—Lo siento mucho, ella no estaba muy a favor de que buscara psicóloga —El hombro de Adora fue tomado por la psicóloga.

—No te preocupes Adora, lo entiendo —Catra soltó una risita.

—Soy un reto para ti ¿No? —Preguntó sentándose con cuidado.

—Catra, comportate —Susurró Mermista golpeandole con su cuchara.

—Lo digo en serio, el toque en su brazo es algo que usamos siempre, nos da cercanía, confianza, te sientes escuchado, consolado, el roce siempre es importante... Que pena que ni tocarme la mano podrás —Dijo con burla.

Todos quedaron mirando a la psicóloga quien dio un respiro pesado y sonrió hacia Catra.

—Si-

—Miren su cuerpo, dirigido hacia mí —Dijo mirándola de reojo—, su atención está concentrada en mí.

—Si sabes de psicología tienes que ser una estudiante ¿No?

—Soy una prostituta —Dijo con normalidad—, y aunque no lo creas damos más servicios que sólo tener sexo.

Adora miró a Catra con orgullo, sus celestes ojos brillaron luego se dio cuenta de la situación mirando a la psicóloga con preocupación.

—Bien, si así te gusta ser tratada, bien por ti, no atiendo profesiones, atiendo a personas —Tomó otra actitud mientras se sentaba en la mesa.

—Evaluó al cliente y se adaptó a él, una consulta ¿Eras prostituta? —Preguntó, Bow se atoró con la comida.

—¡Catra! —Exclamó Glimmer sin palabras.

—Te odio —Susurró la mujer.

—Lo sabía, no me puedo llevar con este tipo de gente —Contó con simpleza.

—Tengo un contrato con Adora por un mes, así que un mes te atenderé —Susurró poniendo sus manos en la mesa mientras se acercaba a Catra así.

—Veamos quien hace de su vida un infierno primero —Dijo entre risas mientras se alejaba.

Mermista le tiró agua a la mujer al ver lo que trató de hacer, la psicóloga sólo limpió su cara y salió de la casa.

—PFF —Catra comenzó a reír burlesca.