Mis hermanas y yo habíamos cogido por costumbre reunirnos los martes, después de mi clase de Herbologia. Esta reunión era diferente pues Kara estaba ocupada con sus entrenamientos de quidditch pues se jugaban la 2º posición en la copa de quidditch lo cual les permitiría ganar ventaja para ganar la copa de las casas. Lo malo: jugaban contra Hufflepuff.
- Sí, Marlene es amiga de James y el resto de los chicos – explicó Jade
- ¿Tu sabias lo de los puntos? – le pregunté
- Sí, pero Sirius y James me dijeron que asumirían las consecuencias
- ¿Qué hay de malo en eso? – preguntó Chelsea – Deberías de tener cuidado con Marlene. Es experta en meterse donde no la llaman
- De eso sabes tú bastante bien – le dijo Jade con malicia y Chelsea la fulminó con la mirada
- También es experta en hacer perder la paciencia a la gente – Añadió Chelsea – y es algo que no tienes el lujo de perder. Tu numerito en el partido de quidditch casi hace que te descubran y eso, también implica un nosotras
- La profesora Sprout tardó más de una semana en quitar la hiedra venenosa del campo de quidditch. Dumbledore la convenció de que tal vez fue algún hada enfadada por el alboroto del partido quien depositó las semillas después de se terminara. – me contó Jade - Ahora, lo que deberías de hacer seria concentrarte en los exámenes
- Pero si para eso aún queda mucho – proteste
- Sí, pero si algo caracteriza a los profesores de este colegio – me dijo Chelsea – es que se piensan que su asignatura es la única que existe y la única que importa. Yo de ti, iba empezando. Después me lo agradecerás.
La época de los exámenes ya había llegado y con ellos el calor del verano. Después de San Valentín los días se hicieron cuesta arriba pues, como bien me había advertido Chelsea, las horas libres en Hogwarts no eran horas libres. Los trabajos y estudiar para los exámenes ocupaban la mayor parte del tiempo.
Las chicas y yo decidimos no acudir al partido de Hufflepuff contra Ravenclaw, para poder entregar a tiempo los dos trabajos de la profesora McGonagall.
Hacia la noche, Seth y Carl entraron al salón. No les preguntamos por el partido pues, por la expresión de su rostro, Hufflepuff había perdido.
Al día siguiente, comprobamos que Hufflepuff se situaba segunda en la copa de las casas, superada por Ravenclaw. El gran problema era que el siguiente partido de Quidditch era contra Gryffindor, líder de la copa de Quidditch. Estábamos acabados.
El acumulo de trabajos y horas de estudio pasaba factura en las clases. A finales de abril, Slughort nos mandó hacer una poción para olvidar pero olvide los ingredientes. En fin, la hipocresía.
Además, mi cumpleaños era pronto y las chicas no paraban de organizar cosas para ese día. Era mi primer cumpleaños en Hogwarts. El cumpleaños de Sophia había sido el 10 de abril y le habíamos preparado una mini fiesta sorpresa en el dormitorio de los chicos, con tarta y confeti, mucho confeti. Tanto que tardé más de una semana en quitármelo todo pues, misteriosamente, mi cama amanecía llena de pequeños trozos de confeti.
Además de los exámenes, debía cuidar mis poderes. Digamos que el estrés no ayudaba mucho.
Después de comer en el Gran Comedor, me dirigí a la biblioteca pues necesitaba un libro para un trabajo individual de DCAO. Sophia ya lo había hecho y Karla masculló que antes de hacer ese tenía otros 20 por hacer.
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El legado de los Amery (Sirius Black y tu)
FanfictionSer la menor de 4 hermanas no es algo que le desee a cualquiera. A esto hay que sumarle el peso familiar que llevo a mis espaldas. Si mi vida no es fácil, lo es menos convivir en Hogwarts con tus hermanas y los Merodeadores y lo que es peor, ¿qué pa...