El 1 de septiembre llegó más rápido de lo que había esperado. Después del incidente del Callejon Diagon, Jade, Chelsea y yo prometimos no comentar nada de lo ocurrido.
Estaba deseando volver a Hogwarts pero extrañaría la libertad de poder usar mis poderes. Lo que si no echaría de menos es ser el objeto de las bromas de mis hermanas, que aunque se habían reducido considerablemente por parte de Jade y Kara, para Chelsea yo era una de sus cosas favoritas de verano. Torturarme.
Por suerte, había mejorado en mi control del poder del bosque y ella también había probado un poco de lo mío. En más de una ocasión se despertó de su siesta en el jardín colgada de lianas.
Esa mañana, no tardamos en levantarnos. Queen ya estaba en su jaula, al igual que Augus. Las lechuzas ululaban, ansiosas por regresar a Hogwarts.
Ayudé a mi padre a llevar los baúles de Chelsea al coche. Era la que siempre llevaba más maletas. Llegamos a Kings Cross a las once y media. Cargamos todo en los carritos mientras saludábamos a familias de magos que llegaban a Kings Cross de la misma manera que nosotros. Cristopher y Judith, los amigos de Jade, se acercaron para saludar con sus baúles y acompañados por sus padres.
Doce personas caminamos hasta el andén nueve y tres cuartos. Muchos muggles se nos quedaron mirando. Lo que más llamaba la atención eran las 3 lechuzas y el gato de Judith.
- Kara primera —dijo Mary, nuestra madre.
Kara avanzó deprisa y desapareció. Todos la seguimos hasta que los 12 cruzamos la barrera.
La estación está a rebosar, llena de cabezas coronando tanto túnicas mágicas como ropa muggle. El tren aguarda en las vías con la paciencia de todos los años.
Me reuní con mis padres y mis hermanas, los cuales se estaban despidiendo. Por el camino vi caras conocidas que me saludaron mientras yo empujaba mi carrito. Lo detuve al lado de mis padres y estos me ayudaron a bajar las cosas.
- No hace falta que os repita las cosas pero, por si acaso... - comenzó nuestra madre
- Por favor mamá, no empieces de nuevo – dijo Chelsea rodando los ojos
- Tened cuidado. Sobre todo tu _____. Este suele ser el año en el que los poderes están más descontrolados.
- Tranquila mamá – dijo Jade – Estaremos cerca para echarle una mano
- Habla por ti – susurró Chelsea. Nosotras tres fuimos capaces de escucharla.
- Bien. – dijo nuestra madre
- Mucha suerte .- Dijo nuestro padre
Nos despedimos y subimos al tren. Ayudamos a Chelsea a subir sus dos pesados baúles.
- Este año no hará falta que compartamos compartimento, verdad? – dijo Chelsea y sin esperar ninguna respuesta avanzó por el pasillo buscando a sus amigos,.
- ¿Algún día cambiará? – dijo Jade
- No esperes gran cosa de ella – respondió Kara
Busqué a mis amigos y los encontré en uno de los compartimentos a la mitad del tren. Carl ayudaba a Sophia con sus cosas y, cuando esta me vio, soltó su baúl y Seth tuvo que echarle una mano a Carl antes de que se le cayera encima.
- Hola – la saludó Sophia abrazándome
- ¡Pero si os habéis visto hace unos días! – protestó Carl que se limpiaba el sudor de la frente por el esfuerzo
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El legado de los Amery (Sirius Black y tu)
Fiksi PenggemarSer la menor de 4 hermanas no es algo que le desee a cualquiera. A esto hay que sumarle el peso familiar que llevo a mis espaldas. Si mi vida no es fácil, lo es menos convivir en Hogwarts con tus hermanas y los Merodeadores y lo que es peor, ¿qué pa...