Underdarkness Sans 12/?

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•° Narra A-Chan ♥

Los días pasaban, y no podías comprender el motivo por el cual Sans permanecía tan ausente...era como si él mismo se hubiese perdido en sus propios pensamientos, preferías guardar las distancias hasta que hubiese ordenado mejor las cosas que tuviese pendientes, pues todavía desconocías ciertas facetas suyas y no estabas segura si interrumpir para exigir unas respuestas a lo que le sucedía. Además de que el orgullo de admitir que te preocupabas de alguna forma por ese cabeza hueca te hacía tener una ligera presión en el estómago al igual que una sensación pesada que tiraba con fuerza de tu pecho...recordaste las menciones de Sans acerca de las almas, le era conveniente que supieras al respecto si...tuvieras la desgracia de encontrarte con su hermano para que supieras los hechos básicos en caso de defenderte y atacar si era necesario.

Puede que Sans actuase como un maldito gilipollas ligón de chistes macabros, pero todavía tenía ese lado amable que no buscaba la violencia a menos que fuese para proteger a alguien importante...

El calor solo subía a tus mejillas ante sus palabras de que a pesar de todo se aseguraría de protegerte pero el mostrarte cómo desenvolverte en una pelea le tranquilizaba...por eso te habías visto envuelta en esta situación, la nieve caía en un ritmo suave sobre tu cuerpo abrigado, tenías que admitir que las antiguas chaquetas de piel de Sans daba un calor muy agradable, convirtiéndose tras muchas reprimendas en una de tus prendas favoritas, en especial para el clima de temperaturas tan bajas como Snowdin...al menos te entretenías tratando de burlarte de él, pues sabías que adoraba verte en su ropa por los comentarios tan poco apropiados que solía decir en un momento para distraerte, así que siendo la mujer adulta que eras, tratarías por todos los medios ocultar tu rostro con la capucha tan acogedora del cómodo abrigo actuando indiferente a su presencia...eso de verdad le molestaba, hasta tal punto que te alzaba en sus brazos buscando más cercanía contigo...

Eso no podía hacerlo ahora, no cuando estabais en una lucha de práctica para tu defensa personal...las estadísticas de Sans eran más altas de lo que alguna vez imaginaste dada a su personalidad tan perezosa y coqueta, ahora ese cabeza hueca solo se mantenía en pie, jugando con los bolsillos de su chaqueta haciendo un tenue balanceo con sus piernas...mirándote expectante esperando tu próximo turno...

- ¿Que pasa corazón? ¿Tantas ganas tienes de deshuesar a este esqueleto? -

Solo suspiraste llevando una de tus manos a tu nuca tratando de darte fuerzas a tí misma...en algún momento de la batalla buscaría adentrarse bajo tus nervios con esas palabras tan indecentes que hacía sonrojarte ligeramente, pues en parte te acostumbraste a ese lado suyo tan descarado que parecía serle entretenido el ver como tus piernas se retorcían en busca de alejarte de inmediato cuando decía tales cosas...

No obstante una sonrisa genuina asomaba por tus labios al igual que una idea maliciosa pasaba por tu cabeza...dos podían jugar a este juego...

- La verdad...solo estaba pensando en las otras opciones, siempre me has mostrado como atacar, además de observar las características de mi adversario y el uso de objetos...pero...-

Tu mano se movía en un movimiento burlón trazando un camino al pequeño cuadro de texto ligeramente amarillento donde en letras finas aparecía la sección de "Actuar"...una variedad de opciones que nunca antes habías tocado a excepción de "Checar" te provocaba una curiosidad que solo podrías saciar atreviéndote a pulsarlos con diversión...quizás podrías devolverle a Sans todas las cosas que te hizo para avergonzarte tan fácilmente...

- Se ve interesante...¿No lo crees Sansy? -

Sintiendo una ligera descarga en tus dedos, presionaste de manera impaciente la opción de "Coquetear" viendo cómo las cuencas de Sans se oscurecieron de repente...no sabías si se debía al pequeño apodo que podría haberle desconcertado, o por el hecho de que estabas siendo muy audaz en esta ocasión...supongo que no esperaba de ti tales cosas y solo podía quedarse parado rígidamente esperando tus acciones...

- Hey Sans, ¿Acaso eres un diente? ¡Porque no puedo sonreír sin ti! -

...

Esperabas que no fuera tan malo...pero fue más horrible de lo que quisiste, ya estabas esperando que Sans te pidiese misericordia para terminar con estas escena tan vergonzosa, de la cual apenas podías retener tus respiraciones aceleradas mirando los alrededores con la esperanza de que enfocando tu atención en cualquier cosa excepto cierto esqueleto, te fuera de ayuda para calmarte...hace semanas no pensaste que dirías un coqueteo tan patético con el monstruo que te trajo hasta aquí consigo a pesar de tus protestas iniciales...

Tampoco imaginaste que serías testigo de un resoplido poco atractivo que te hizo sobresaltar entre el montón de nieve que ya se metía en el interior de tus botas...tus pupilas se agitaron cuando viste algo tan...entrañable que te hizo sonrojar niveles que no conocías...

Sans siempre había sido bastante serio, al menos con la mayoría de temas que se te ocurrían, recurriendo solamente a su actitud despreocupada cuando el coquetear contigo se había convertido en una naturaleza para él. Pero solo eso, en circunstancias donde parecía consumido en ideas propias que desconocías se mantenía reservado...guardando distancias prudentes de ti que perfectamente te resultaron evidentes por la manera que su cuerpo se mantenía rígido si buscabas acercarte a su lado...solo por la curiosidad de saber la razón por la que eso sucedía con frecuencia...

Su sonrisa cínica en un desesperado intento de comportarse natural cuando lo mencionabas te hacía querer golpear su estúpido cráneo para ver si eso le hacía poner los pies sobre la tierra una vez más...

Así que...ese sonido tan...fresco de su voz te hormigueó por toda tu piel, una sincera carcajada escapaba de sus labios al igual que ligeras sacudidas atravesaban los huesos de su cuerpo, en especial sus fémures que luchaban por mantener el equilibrio, pero tantos traqueteos que provocaba su risa le hicieron fallar en el intento, terminando siendo un desastre cubierto de la fría nieve...teniendo movimientos forzados de sus manos que buscaban sostener su estómago si es que no carecía de uno...las respiraciones profundas que tomaba para recuperar aliento le hacían ser más descuidado y ruidoso...sus mejillas resplandecían de un azul cian que hacía resaltar la forma redondeada de su rostro...al igual que su mirada se veía más suave...se le veía...feliz...un esqueleto completamente diferente al que conociste en esas extrañas circunstancias...

Se sintió familiar...como si hubieses visto muchas veces de esta manera, pero no lo recordabas así...

Te quedaste esperando jugando con tus propios pies teniendo una sonrisa genuina por haberle hecho reír como si hubiese pasado mucho tiempo desde que lo hizo...ese pensamiento...solo fue un incentivo ante el hecho de que todavía desconocías ciertas cosas que rondaban a Sans...y por primera vez...no te importaría saber cada una de ellas...

- Joder muñeca, échame un hueso aquí. -

Su voz ronca ligeramente forzosa por ese momento donde su risa fue el único sonido del subsuelo te trajeron de vuelta a la realidad...el cuadrado de combate se había cerrado sin que pudieras hacer nada al respecto, sabías que ese esqueleto de actitud peculiar era una especie de "jefe" que podía intervenir de una manera especial en batallas que te daba curiosidad por saber concretamente a que se refería...según él era más difícil de explicar de lo que creías, por lo que no hiciste más preguntas al respecto.

Suspirando profundamente te acercaste unos pasos a tu cabeza hueca para ayudarle a ponerse en pie, pasando uno de sus brazos sobre ti para que te rodeasen tus hombros...lo que no esperabas fue el movimiento rápido que hizo para que acabases sentada en su regazo...su cráneo frotaba la curvatura de tu cuello en un sonido semejante al ronroneo de un gato necesitado de afecto, querías molestarte con él pero su expresión se le veía tan...afectuosa que no tuviste la insensibilidad de alejarlo...

Poco sabías que la tranquilidad que ahora experimentabas estaba por acabase...y que el destino os deparaba unas duras pruebas...

×|| Continuará •<• ||×

AU Sans x Lectora 2!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora